Por si a alguien le apetece darse una vuelta, esta tarde y mañana compartiré conversación en la Escuela de Organización Industrial en torno a nuestras ideas de empresa abierta. La culpa de todo es de Tíscar Lara, Juan Freire & cía. Hasta donde llega mi información esta escuela de negocios se ha embarcado en un tránsito hacia nuevos territorios. En su momento me invitaron a participar en su reflexión, pero no pudo ser por cuestiones de agenda.
Hoy martes a las 19:00 pondremos en común algunas ideas en una sesión que hemos denominado «La empresa abierta, competitividad en el siglo XXI». Más información aquí. Por cierto, que el 19 de mayo también se acercará Alorza para hablar del blog en la empresa.
Por otra parte, mañana miércoles día 13, de 14:00 a 16:00 horas, comparto seminario con Genís Roca para tratar de argumentar por qué y cómo tenemos que abrir las empresas. Será un auténtico placer estrujar puntos de vista en torno a la cuestión. ¿Por qué? Creo sinceramente que nuestros principios de empresa abierta están demasiado lejos de la realidad. Se dan de bruces con los modelos mentales imperantes en gestión empresarial. Así de simple. Y supongo que si no somos capaces de mostrar beneficios, casos de éxito y caminos para transitar hacia espacios más abiertos, nada de todo esto tiene demasiado sentido.
Adjunto el material que utilizamos David Sánchez y yo en el módulo sobre empresa abierta que llevamos a cabo este pasado fin de semana en nuestro MBA Executive.
Actualización.- Disculpas, la conferencia no pudo ser, Iberia de por medio.
9 comentarios
Por cierto Julen,
Estaba yo pensando, que un vasco y un catalán debatiendo el día del Athleti – Barça… no deja de ser sardónico…
🙂
Será un placer coincidir y compartir !
Suerte que tenéis una medio andaluza medio cántabra para neutralizar exaltaciones 🙂
Es de agradecer que la EOI se renove con ideas frescas como las vuestras, porque lo necesita. Bienvenida a esos nuevos territorios…
En cuanto a lo que dices, de que nuestros principios estan demasiado lejos de «la» realidad (la pongo entrecomillas porque hay muchas…), pues yo me alegro de ello, porque eso sugiere que estamos en la senda de la transformación.
Sinceramente pienso que… ¡¡¡Es la (vieja) realidad la que hay que cambiar, y no nuestros principios!!!.
Yo prefiero que el cambio tarde… pero sea genuino. No quiero «negociar» con los «modelos imperantes» en gestión empresarial, porque buena parte de ellos no responden al mundo en que vivimos.
De hecho, creo que nuestros principios son correctos para buena parte de «la realidad» en que habitamos. El problema está en la (vieja) empresa, que es lo que hay que transformar , porque no da respuesta a esa «realidad».
¿Tenemos que demostrar algo? Pos si, estoy de acuerdo. El cambio no se produce si no se demuestra que es bueno. Pero incluso para eso, podemos y debemos renovar el lenguaje, es decir, los indicadores por los que se mide «el éxito» de esos «casos de exito» que propones buscar. ¿vamos a presentar «casos de exito» siguiendo los mismos referentes de esa mentalidad arcaica? No caigamos en la trampa.
En el fondo de la cuestión hay algo muy simple: ¿queremos ir tan rapido? ¿estamos tan impacientes? Pues yo creo que la impaciencia lo contamina todo. Es mejor hacer las cosas bien. ¿vienen pocos a nuestro llamado?.. pues vale, ya vendran, sigamos explicando lo que queremos….
Darse tanta prisa solo tiene sentido si tienes que vivir de esto. Es lo que temo del «posibilismo» de las consultoras, bajo el imperativo de facturar lo 2.0, como nueva moda del management. Su logica es: si no lo «descafeinas», nadie lo va a comprar, de qué vivimos. Lo que llaman «realismo» no es tal, aunque se venda así, sino es falta de coraje y voluntad para transitar por caminos mas dificiles, y mas largos.
Pues mira, Julen, no quiero desdibujar tanto esto hasta hacerlo irreconocible, aunque nuestro territorio tenga que crecer despacio. Calidad en lugar de cantidad, amigo.
Así que, con permiso de Genis, intenta hacer el contrapunto-de-la-utopia, para que esto siga teniendo gracia… ¡¡y tu sabes hacerlo mejor que nadie!!!
Hola Julen,
Siento lo del vuelo.
Siguiendo la línea de Amalio, si queremos asegurar el aprobado tenemos que apuntar al sobresaliente.
Claro que nuestros principios están lejos de la realidad. En algún comentario anterior en tu blog (lo tengo reciente, porque hago una referencia en mi último ) me he referido a los que divulgamos 2.0 en general como los nuevos Ilustrados, con tendencias despóticas y/o evangélicas. Puede ser frustrante a veces, pero como creo firmemente que lo que estoy contando (e intuyo que tú también) haría el Mundo un poco más feliz, pues a seguir evangelizando. Hale.
Envidia me dais Genís y tú de andar por ahí juntos. Ya le conocía de su época en Infonomía, y tuve la suerte de conocerle personalmente hace unos meses en un evento en Palma. Espero desvirtualizarte pronto a ti también. Un abrazo,
Jaime
Disculpas por el retraso en retomar el hilo de los comentarios.
@Genís, como bien sabes, lo fue, lo fue.
@Tíscar, te salva tu mestizaje.
@Amalio, intersante lo que dices de los casos de éxito. Tenemos que hablar más de «prácticas interesantes». Sin buscar más. Prácticas que nos ayuden a ver cómo podemos hacer las cosas de forma diferente. Por otra parte, cuando hablas del «ir rápido» esa es precisamente una de las paradojas que manejamos: en un mundo acelerado necesitamos pensar en periodos más largos de los habituales (es la idea del tiempo glacial).
@Jaime, ya he hecho la encuesta. Gracias por el enlace.
Muchas gracias y un saludo muy cordial!!!
Jaime
Por fin empezamos a poner un poco las cosas en su sitio y estoy conforme contigo en que «Creo sinceramente que nuestros principios de empresa abierta están demasiado lejos de la realidad». Al final una empresa en el mundo actual tiene un principal objetivo: retribuir legitimamente al accionista.
Sea ONG, una fundación pública o una empresa privada no se puede entrar en el ánimo de perdidas. Yo trabajo en una industria, con sus materias primas, su mano de obra, su transformación, sus máquinas… y fabrico algo que todos consumimos y que da de comer a muchas familias.
Por ejemplo, la «nueva EOI» podrá hacer lo mismo…Una universidad o un centro educativo tiene que vivir de sus alumnos y del prestigio de los alumnos: paguen ellos la matricula o el estado… pero necesita alumnos para sobrevivir.
Colaborando y haciendo 2.0 no se genera negocio… y es muy poco ético hacer «negocios ruinosos», alejados de la realidad, con un dinero que no es de los gestores sino de todos los españoles, no?
[…] el siglo XXI”. Una llamada visando a tiempo del percance invitaba a ir hoy a un mano a mano con Julen y Genís, en el "Ciclo Ecoinnovación y el futuro de las economías abiertas", de EOI. Una clase […]
[…] viene tras haber estado viendo el seminario organizado por la EOI y en la que participaban Julen Iturbe-Ormaetxe, Genís Roca y Tíscar […]