Alianzo estrena vara de medir las blogosferas. Agradecemos el intento. Tú aquí y tú aquí, tu profesional y tú artista de la pista, tú videoblogger y tú azul, tú naranja, tú verde. Medir, ubicar, situar, dime dónde estás, que no te veo. Así que a contar: número de visitas, número de enlaces paquí y pallá, número de actualizaciones, número de quien te visita, número de quien te enlaza, número parriba, número pabajo. Eso sí, el número de la suerte y te llueven millones. Suerte.
Me vuelvo atrás en el tiempo porque ya lo hemos discutido muchas veces. Recursividad sisífica en estado puro. Son las limitaciones de un sistema que necesita cuantificar la vida, que de impactos vive la publicidad. Alianzo no hace más que aceptar la regla imperante en el mundo digital: eres rastreable, ¡defiéndete cobarde!. Así que tu identidad de dominio público (cómo me gusta esta presentación de Juan Varela) luce al sol expuesta en estos rankings del señor. Y lo aceptamos porque estamos sometidos, también, a público escarnio. San Page Rank lleno eres de gracia.
Pero mirando a la larga cola, son cada vez más cuestionables y se me queda cara de tonto. Porque los rankings son una reducción de la realidad. Incapaces de captar detalles, se someten a las leyes 1.0 de las audiencias masivas. Porque más que un ranking necesitamos encontrar a colegas de nuestro hueco en la larga cola, ¿verdad?
Pero, claro, los rankings son útiles a la vez que perversos. Si no, leeros a David de Ugarte vía los enlaces que dejo más abajo. Adolfo Estalella, blog yacente, nos ha machacado a preguntas en torno a esta cuestión y supongo que tendremos que esperar a que publique algún día su investigación. Mientras tanto, puestos a pedir me atrevo a pedir nuevas categorías en estos rankings:
- blogs ácidos
- blogs cerebrales
- blogs intermitentes
- blogs de colores
- blogs heméticos
- blogs viscerales
- blogs idiotas
- blogs que no parecen blogs…
Y la lista tiende a infinito, incluyendo la categoría de los blogs que tienden a infinito.
En fin, se me ocurre que para repasar esto de los benditos ránkings podrías leer, cuando te aburras, estas cosas:
- La entrada de David de Ugarte en su contextopedia y su artículo Tesis sobre los rankings y el rankismo en la blogosfera.
- Este reciente artículo de Tíscar a cuenta del artículo de El País Aristocracia bloguera.
- Ni marketing viral ni ranking de blogs, Me quedo al fondo, en la larga cola, dos artículos de este blog.
- Esta buena colección de artículos de Adolfo Estalella sobre rankings.
15 comentarios
O…. cuando algunos, pocos, quieren rentabilizar y vivir a costa de la creatividad y la inteligencia de otros…..
Es una forma perversa de convertir la red en pirámide
He probado el nuevo sistema de Alianzo por ver hasta dónde llegaban las opciones y si había forma de asociarse personalmente a las distintas categorías o crear otras tan sugerentes como las que tú propones. El caso es que no se puede. Porque en esta vida no es «funcional» estar en varias (a efectos de caja publicitaria y marketing directo). La diversidad no es fácil de colocar en filas autoexcluyentes. La identidad es mucho más compleja.
Leí en su día que una de las bonanzas del «movimiento blog» era que ya no viviríamos alienados por 3-4 grandes medios de comunicación, sino que la información y opiniones circularían en modo abierto. ¡Qué bonito!
Ahora miro ese comentario con añoranza, mientras veo que son 3-4 «grandes» bloggers son la referencia de la inmensa mayoría.
Y es que el ser humano, amigos mios, siempre acaba replicando sus errores (sea en un mundo 1.0 o 2.0). Y como no, asumo mi parte de culpa alienada y/o no resistente a la misma tendencia de toda la vida.
Abrazos.
Muy buen blog, te felicito. No deberías leer esto… Es retorcidamente maquiavélico. Entra y verás, ya me dirás como te funciona:
http://www.personal.able.es/cm.perez/Extracto_de_EL_ARTE_DE_LA_VENTAJA.pdf
La blogosfera como parte de las “multitudes inteligentes” está descentralizada, ‘pasa’ de jerarquías y clases y, al menos en teoría, sólo interesa crear, comunicar, colaborar y dialogar.
No sé al resto de contertulios pero cuando escribo sólo debo lealtad a mis paradigmas y razones, a amalgamadeletras y a participar en otras que sigo regularmente.
Con la polémica del artículo de ‘El País’ sobre la aristocracia de la blogosfera, leí en algún comentario (sorry, no recuerdo dónde) que prefería tener pocas e inteligentes conversaciones en su blog que miles banales.
Yo me apunto a ese carro… hasta que me vea obligado a contratar más gente porque intuyo que voy en el camino de convertirme en un ‘aristocrata’ de las conversaciones. Ya me gustaría 😉
… y los más recursivos de todos «los blogs que hablan de blogs».
Tienes toda la razón, primero se etiqueta y cuantifica, y después se filtra y se capa la larga cola.
Quizás todos estos rankings sean sólo una herramienta para lectores de blogs. Pero para los que escribimos blogs es algo sin mucho sentido y que distorsiona la blogosfera.
Porque no escribimos para competir entre nosotros sino para todo lo contrario.
Difiero, con las opiniones de este hilo:
La existencia de rankings a mí, personalmente, me parece algo bueno; por dos cosas:
– primero, dado que no existen, -o si existen- los directorios de blogs tienen poco enganche, los rankings los suplen. (No dejemos todo en manos de los criterios de «google»…)
– segundo, creo que se entiende «la competencia», como algo peyorativo, como algo negativo, cuando debiera verse como algo estimulante ¿por qué no?
Tampoco creo que haya que darle tanta importancia a estar mas arriba o abajo en un ranking, ¿por que no tomárnoslo como un juego, haciendo y «compitiendo» como quien juega a las «cartas» o al «tetris»…etc.? A mí personalmente, me divierte y me gusta tener competencia. Quiero tener competencia. Y me gusta saber y leer a la gente y sobre gente que publica de los mismos temas que yo. Lo veo algo muy bueno porque me resulta estimulante y saludable. Yo creo que para eso también sirve un ranking. Y creo que hay que utilizarlos, no hay que «venderse» a los rankings.
Otra cosa es el «ranking personal» que tengamos cada un@, en el que medidos por nuestros baremos personales, que nada tiene que ver donde esten los blogs que nos gustan ,según los baremos cuantificados de los «ranking oficiales».
De todas formas, yo creo que las mujeres vemos esto de los rankings de otra manera… con menos testosterona, que no nos vá la vida en ello, vamos.. «A-list»… si es que suena a guasa… 🙂
Respecto a las categorías: en lo que fallan todos los ranking -en mi opinión- una más! -> ya que los directorios de mujeres no rulan… categoría mujeres + lo que sea… please! 😉
Con todo el respeto para Amaia, no creo que el concepto competencia (en el sentido de competitividad) tenga sentido en eso que llamamos blogosfera.
Los blogs que me gustan (cada vez más, por cierto) son competentes pero no competitivos. Los leo y participo (cuando procede) porque no me siento un puñetero número. Jamás he escrito (ni lo haré) en uno de esos blogs masivos donde es absolutamente imposible el feedback ese del que tanto hablamos.
Y la definitiva: ¿Quién hace esas listas de Principales? ¿Ali… qué?
Ya, vale. Queda dicho todo. Cada día me tengo que pelear con una herramienta de software libre tunneada por ellos. Colgar dos fotos en el blog es subir el Kilimanjaro. Colocar un audio, imposible… y eso que se supone que el sentido de la bitácora es que es de un programa de radio.
Pero listas y spam rebautizado como marketing viral sí saben hacer…
Abrazos!!
javi v: […]’esos blogs masivos donde es absolutamente imposible el feedback ese del que tanto hablamos.’
Estoy de acuerdo. ¿Habéis intentado seguir alguna conversación masiva en ADN, 20 mínutos… u otros? En algunas conversaciones masivas:
– publicar los comentarios de forma secuencial dificulta la conversación a veces. Es el mismo problema de los foros. Hay que perfeccionar el seguimiento de la conversación mediante alguna mejora que debería aparecer en forma de filtros por autor del post/palabra clave, no sé… Con +50 comentarios es realmente seguir las réplicas y contrarréplicas.
– hay más incorrecciones verbales, ‘altercado personales’ y mucho ‘ruido’ (aquéllos que están de acuerdo/disienten sin más, sin añadir valor a su mensaje)
txetxu, esa es la cuestión, que la red deja de serlo para volver a anteriores principios verticales.
tíscar, seguro que la riqueza de las personas no puede quedar etiquetada de una forma tan fría.
david, conste que todos acabamos mirando esos rankings. Pero hay que guardar un punto crítico en el zurrón, ¿no?
amalgama de letras, tú sigue así y vas a subir mucho en las listas de grandes éxitos 😉 Luego a ver cómo te las apañas.
telémaco, quizá sea una de las características de estos nuevos tiempos donde lo digital es del todo rastreable. Automáticamente puedes «ordenar» la red. Pero, ¿qué sentido tiene ese orden?
amaya, ya puedes hilar fino los argumentos, jeje. Lo de blogs de mujeres es una buena idea. Aunque quizá la red se pueda tejer al margen de los ránkings. Quiero decir que lo que interesa es encontrar blogs con causas similares y no tanto cómo estén de arriba o abajo en la lista, ¿no?
javi v, tienes que encontrar alguna droga para tu alianzofobia 😉
Pues a mí me gustaría un Technorati que me lo pudiese montar yo, que no me diese «sus» listas sinó que me permitiese montarme las mías, una especie de «algoritmo personalizable» o algo así.
A día de hoy uso mucho Technorati para hacer seguimiento de enlaces, pero los listados no me han servido nunca de nada 🙁
Carme, eso sí que es una buena idea. Me refiero a lo del algoritmo personalizable. Aunque siempre tendríamos el problema de cómo sería capaz de captar los matices que nos interesan.
Hola,contesto, por partes:
Javi v,
Al hablar de competencia, me refiero a esa competencia, que nos hace ir mejorando; entiendo la competencia como una disputa entre dos o mas personas sobre algo, a mí personalmente me gusta encontrar diversidad de opiniones, competir no excluye «crear, comunicar, colaborar y dialogar»; creo que hay tópicos en la blogosfera, que más que actitudes de facto, en la practica, son armas, posturas que venden mas y que están sobrevaloradas. Cuando tú hablas de «blogs masivos», parece que hablas de «armas de destrucción masiva»… ¡uops! ¿? (es una broma) 🙂
Un malentendido, no defiendiendo a los blogs «mas competentes según un ranking», yo no subvaloraría jamás a un blog porque tenga, por ejemplo, 100 visitas al día o menos y el feedback es variable y no creo que dependa tanto de ese posicionamiento.
Defiendo que existan herramientas para conocer que blogs y porque estan en unas posiciones, arriba o abajo, y mejor, si además es internacional, – para mi, la mejor novedad de la nueva herramienta de Alianzo-. (Tiempo al tiempo, veremos como vá)
¿quien hace esas listas? No me he preocupado demasiado en saber quien los hace, pero son «empresas», supongo que en casi todos los casos. A mí me interesa conocer sus criterios, que me pueden gustar más o menos, pero los datos pueden ser útiles y repito creo sirven tb. para encontrar nuevos blogs interesantes. Todo depende de que busque cada cual en un ranking, el uso que le dé. Creo que «la información y opiniones circularían en modo abierto» si no miraramos tanto a los primeros de los listados de rankings.
Ya que todos nos quejamos tanto, estamos de acuerdo en que los rankings, como dice Tiscar «La identidad es mucho más compleja» y no valoran la calidad de contenido y conversaciones, debería crearse un ranking hecho por blogueros-as basado en esos valores. (Si existe no lo conozco) ¿quien es el valiente?
amalgamadeletras,
Has puesto ejemplos de «medios de comunicacion» más que de blogs, en mi opinión aunque utilicen las mismas herramientas, yo no los clasifico como «bitácoras».
De acuerdo contigo en apuntarse a ese carro de «prefería tener pocas e inteligentes conversaciones en su blog que miles banales»…
Hay algo imprevisible, lo mejor de una bitácora… no sabes quien o porque te ha leído 🙂
Y me sumo a la propuesta de último comentario de carme
Saludos a l@s contertulios de este hilo, muy interesante,
amaya, lo mismo tienes que escribir en tu blog para defender ideas alto y claro, ¿no? 😉
[…] con el modo cascarrabias activado, sigo pensando que estas listas de influencers las carga el diablo. Es una carrera competitiva que me sobrepasa. A codazos tweetazos y newsletters hay que abrirse […]