3: Lesaka – Hernani

La tarde en Lesaka tuvo mucho que ver con reparar los tropecientos pinchazos con los que aparecieron quienes no optaron por la variante verano azul de esta segunda etapa. Es lo que tiene el mountain bike, que vas por el monte y pinchas donde menos te lo esperas. Se ve que atravesaron algún tramo juguetón.

El albergue Matxinbeltzenea muy agradable, bien atendido por un par de chicas. Cena sencilla y charleta de hombrones hablando de sus cosas. Ya sabes, diez tipos juntos podemos ser muy previsibles 🙂

La mañana deparó la grata sorpresa de que todavía quedaba algún pinchazo que durante la noche había hecho su trabajo de hormiguita sacando aire de la cámara. Así que otra vez manos a la obra y a reparar.

Hablando ya de la ruta, la salida desde Lesaka es muy agradable, acompañando al río y luego subiendo poco a poco entre pinos y hayas. Una subida con algún que otro repecho pero bastante llevadera. Los pasos entre hayas tienen siempre su magia. La luz es diferente y evoca cierto misterio. La sorpresa es que arriba espera un lago espectacular, Domiko.

Allí hacemos reportaje fotográfico con un Mikel desbocado cual paparazzi en busca de nuestro mejor lado. Ya compartiré fotos cuando las pase. Creo que estamos todas guapisisisísimas. Luciendo palmito, bici por delante y tó bien en su sitio. El caso es que el lago se merecía unas buenas fotos. Hay que desviarse de la ruta y bajar 300 metros pero bien merece la pena.

A partir de aquí sigue un rodar fácil por pistas anchas. Ya me doy cuenta de que el traqueteo de las bajadas provoca quejas de mi mano izquierda, que también luce un hermoso color morado. Las subidas sin problema y las bajadas, en vez de para disfrutar son un pequeño quebradero de cabeza. Así que en Aritxulegi decido terminar la etapa de nuevo en plan verano azul. ¡Vaya vicio voy a coger! Jajaja.

En Aritxulegi cae hamaiketako morrocotudo. Lujuria salivante: tortilla de patata y bocatas de chorizo, lomo con queso, bacón con queso y la de diossss. Ay, qué dura es la vida del mountain bike. Y yo con estos pelos.

Total, que son las 13:45 y estoy como un marajá aquí en el hotelito en Hernani después de venirme por Oiartzun pedaleando por asfalto. Me acaban de llamar para decirme que los esforzados de la ruta -la de verdad- llegan tarde. Tengo tiempo para degustar un quesito de oveja, escribir este post y mirarme en el espejo para ver las huellas de ese peaso hostia que me metí hace un par de días. Como paberme esgrasiao.

Bueno, os dejo, que me tengo que defender de estas p… moscas. Nos vemos.

Distancia recorrida: 43,7 km. Desnivel acumulado: 889 m. Tiempo de pedaleo: 3h 12min.
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Enlaces con material complementario

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• Todas las crónicas de la Tib en este blog
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