La medición del valor social de una organización

by Julen

Medición Valor Social

Hace unos días en una conversación con mi director de tesis, Cándido Román Cervantes, a cuenta de una posible colaboración en un máster de cooperativismo en economía social, me ponía al día sobre la investigación que le ocupa en los últimos tiempos: la medición del valor social de las organizaciones. De hecho, este viernes día 22 han diseñado una jornada al respecto en el salón de grados de la Facultad de Economía, Empresa y Turismo de la Universidad de La Laguna. Esto, por supuesto, en el marco de las actividades de CESCO, la Cátedra de Economía Social y Cooperativa.

Supongo que hoy en día ejercer la responsabilidad social corporativa pasa, sí o sí, por cuantificar la aportación que se realiza a la sociedad. Desde una perspectiva de tener en cuenta a los stakeholders, no hay alternativa: no se trata solo de que de una u otra forma participen de la escena, sino de que la organización evalúe qué les está devolviendo. Más allá de las cuentas tradicionales de resultados se impone una mirada mucho más ambiciosa que supere la visión cortoplacista a la que suele conducir lo económico. No se trata de mirar solo al output sino al outcome y con visión, hasta donde sea posible, de triple bottom line. Esto…, disculpas por la ristra de anglicismos con los que os acabo de regalar 😉

Para que os hagáis una idea de lo que pretende esta jornada sobre medición del valor social, copio/pego sus objetivos:

  • Facilitar el conocimiento de un sistema de información que complementa y amplía el sistema
    contable tradicional en una doble dimensión, tanto en cuanto a la naturaleza del valor considerado como a los grupos de interés contemplados, y que permite cuantificar el valor social de la sustentabilidad a escala organizacional.
  • Transferir la potencialidad que el sistema de cuantificación del valor social de la sostenibilidad brinda a las organizaciones, mostrando experiencias innovadoras al respecto.
  • Fomentar el debate y la reflexión interdisciplinar en relación con la generación de valor económico y social por parte de las organizaciones y la sostenibilidad.
  • Facilitar la generación de redes de colaboración y de trabajo entre empresas y profesionales que compartan la inquietud por desarrollar actividades que sean sustentables desde una perspectiva integral y deseen cuantificar su valor.

Como veis, se repite la idea de cuantificación. Bueno, en las empresas hay está costumbre de medir. Ya sabes, ese famoso mantra: lo que no se mide no se puede mejorar. No sé hasta dónde es cierto, pero sí que jugar con el mismo esquema mental puede ayudar a que se entienda que sí, que si medimos el valor social de aportamos, entonces todo adquiere un sentido mucho más potente.

Puede que el sentido del propósito del que hablan las organizaciones teal o del alma que tienen las organizaciones, en palabras de Guillermo Echegaray, conduzca a territorios complejos de gestionar. Por eso, su media naranja puede venir de enfoques que los rebajan (en el mejor de los sentidos) al plano de lo cuantificable. Sí, lo de medir el valor social de una organización puede tener sentido en un momento en el que, desgraciadamente, parece haberse impuesto en muchos lugares una financiarización de las empresas. Con las mismas armas, distinto enfoque 🙂

Artículos relacionados

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.