«INDUSTRIALDIA nace para impulsar el Turismo Industrial en Euskadi a través de la puesta en valor de los principales recursos del Patrimonio Industrial vasco». Así se presenta esta iniciativa. Creo que, bien gestionada, presenta unas posibilidades tremendas. Y no solo como disculpa para retorcer un poco más el argumento de que, como sea, hay que atraer visitantes a un territorio porque se genera riqueza, sino por lo que implica desde el punto de vista emocional y de sentimiento de orgullo por un pasado que también forma parte de lo que somos. Lo que un día fue actividad industrial y hoy es solo recuerdo necesita recuperar oxígeno.
El sitio web creado para dar cobijo a esta iniciativa incluye una amplia colección de recursos. Entre ellos, algunos que me quedan especialmente cerca, geográfica y emocionalmente, como el Puente Colgante, el Museo de la Minería del País Vasco en Gallarta, el Parque Minero de los Montes de Triano y Galdames, la ferrería de El Pobal o el Horno Alto de Sestao. Algunas de estas infraestructuras tienen un pasado demasiado reciente que las proyecta no solo como punto de partida para una actividad museística, sino como recuerdo cercano de lo que conocimos de niños.
Industrialdia incluye, además, una serie de actividades que se vienen llevando a cabo desde este pasado mes de noviembre. En la agenda en curso de este mes de diciembre destaco, por lo cerca que me queda, una visita para conocer la historia de los Altos Hornos de Bizkaia. Se puede realizar los días 7, 11, 14, 21, 22, 26 y 28 de diciembre. Parte de la antigua Escuela de Aprendices a las 11 horas.
En esta visita tendremos la oportunidad de conocer la historia de Altos Hornos de Vizcaya, compañía referente del Sector Siderometalúrgico del S.XX, de la mano de antiguos trabajadores. Estos ex-trabajadores, actualmente voluntarios de la Fundación de Trabajadores de la Siderurgia Integral, nos contarán los orígenes de AHV y nos acercarán al Proceso Siderúrgico Integral. Posteriormente, nos trasladaremos a las cercanías del Horno Alto nº1, donde nos enseñarán los principales elementos estructurales del horno y su funcionamiento. La actividad comenzará en la Escuela de Aprendices de Sestao a las 11.00h.
La inscripción se realiza a través de correo electrónico: prensa@ftsi.es. Los grupos son de 20 personas como máximo. Por otro lado, indicar que el pasado 12 de noviembre se celebró el Foro Internacional de Turismo Industrial de Euskadi. Una sugerencia: estaría bien dar acceso a los textos de las ponencias que se presentaron, ¿no? En fin, bonita iniciativa esta de Industrialdia, no me cabe duda alguna. A ver qué recorrido tiene.
2 comentarios
Muy interesante iniciativa desde luego. Parece que fue ayer lo de todo ese tejido industrial ¿no? En Asturias, cuando voy por Avilés o por la cuenca minera, me da la sensación de lo rápido de los cambios, con el desmantelamiento de la siderurgia y su industria auxiliar. Cuando paso delante de viejas fábricas o minas abandonadas, me produce una sensación extraña de tristeza y melancolía, quizá va más allá del visualizar el desmoronamiento de una parte del tejido industrial y de los empleos de mucha gente, me da la impresión de ser un reflejo d ela votalidad de todo, del paso del tiempo y de lo breve de nuestra propia existencia . No entraré en detalles, y debo decir que lo conozco de lejos, pero la reconversión industrial realizada en País Vasco fue mucho más acertada que en Asturias. Por cierto, tengo pendiente para las Navidades la lectura de la novela gráfica Los chicos del humo, sobre la cuenca minera, tiene muy buena pinta https://editorialpezdeplata.com/coleccion-narrativa-pez-de-plata/39-los-ninos-de-humo-9788494917714.html . El bueno de Alfonso Zapico también dibujó y escribió un cómic sobre Euskadi: Los puentes de Moscú https://www.zendalibros.com/los-puentes-de-moscu/
Asturias o Euskadi son ejemplos de un pasado que fue y que, me temo, no volverá. Conviene mirar al futuro, sí, pero ese pasado también es nuestro, de quienes nos precedieron y convendría que lo pusiéramos en valor por simple justicia con quienes se esforzaron en sacarnos adelante. Tomo nota de las dos referencias que apuntas, Iván.