MONDRAGON People, el talento en tiempos de glassdoor.com

by Julen

Sí, hoy es el día en que existe MONDRAGON People. En el último número de la revista TU Lankide  dedican un monográfico a esta iniciativa y allí dicen que estamos ante un proyecto que pretende «aumentar la capacidad de atracción de talento de las cooperativas». Hoy en día parece que hay un desajuste entre oferta y demanda, no solo en MONDRAGON. En cierta manera es signo de los tiempos actuales:  «todos los informes demográficos advierten de que, en los próximos 10 años, el desequilibrio entre pocos candidatos cualificados para muchas ofertas de empleo irá aumentando». David Sánchez Bote, director de MIK y compañero de fatigas, dice en un texto que ha escrito para la ocasión: «el punto de partida de este cambio es la escasez, lo que lleva a que de un escenario en el que la empresa seleccionar a trabajadores pasemos a otro en el que es la propia organización la que es seleccionada por personas con conocimientos y competencias muy demandadas en el mercado laboral». Pues, no sé, me permitís, con cariño, que introduzca un cierto punto de vista crítico con todo esto.

Vale, los datos están ahí. Hoy las empresas tienen que parecer sexys a los ojos de la gente que ¿quiere? trabajar en ellas. MONDRAGON, como cualquier otra gran corporación empresarial, necesita talento. Y creo sinceramente que se enfrenta a la necesidad de renovarse y de afrontar un potente relevo generacional. O si no relevo, sí un mestizaje más intenso entre generaciones. La pureza se pierde porque el siglo XXI trae otras maneras de entender lo colaborativo o lo cooperativo o como queramos llamarlo. Vivimos en aguas paradójicas en las que hay que jugar con un elemento y su contrario. Ya sé que es difícil, nadie dice que no lo sea.

Iñigo Larrea, responsable de gestión del talento de MONDRAGON, apunta algunas cuestiones muy interesantes en una entrevista que le hacen en la revista. Entresaco varias de ellas:

  • «Nuestro principal punto débil es que somos unos desconocidos en las áreas metropolitanas de nuestro entorno.»
  • «Estamos en sectores que no resultan los más atractivos para los y, sobre todo, para las jóvenes.»
  • «Necesitamos ser más flexibles y más abiertos, aprender más rápido y evitar abrir una brecha digital en personas que hoy trabajan en rareas manuales y repetitivas».
  • «Utilizamos la metáfora MONDRAGON People como un centro comercial en el que cada cooperativa pone su propio escaparate. Un centro comercial sin tiendas no atrae a nadie, pero un centro comercial con mucha variedad y muchas propuestas multiplica el número de personas interesadas.»

Es más que evidente que la preocupación está ahí. El sitio web de MONDRAGON People agrupa la oferta de una serie de cooperativas (no las de toda la corporación, dato curioso) y se viste de modernez: vídeo, mensaje optimista, gente mayoritariamente joven, internacionalización, rollo cool… Sí, eso que cualquier otro «empleador» utilizaría. Claro que se juega con la paradoja porque aparece un concepto que puede chocar: «diferentes«. Sí, se trata de hacer entender que MONDRAGON tiene una oferta ¿humanista? diferente. Aunque se usen los típicos vídeos que te dejan pensando si no estás ante más de lo mismo.

Se habla de la «batalla» por el talento. ¿Una manera de dar a entender que, de verdad, nos peleamos por la gente? Lo siento, no cuela. Un mensaje tan buenista creo que le resta credibilidad. Los mensajes están demasiado edulcorados. Se entiende la intención, pero se cae en el formato estándar. «Nuestro punto fuerte es que somos un lugar diferente en el que trabajar, tenemos una historia real y única que contar». ¿Y para trasladar este mensaje hacía falta «traducirlo» a un mundo de color de rosa como el que ofrecerá el vecino de enfrente?

En Estados Unidos hace mucho tiempo que funciona Glassdoor.com. Me lo haría mirar. En un mundo que se transparenta hay que tener cuidado con los mensajes publicitarios. Lo auténtico suele estar en otros lados.

 

Artículos relacionados

4 comentarios

Iván 14/03/2018 - 18:03

Interesante la iniciativa Julen. Me ha gustado, pese a que siempre hay campo de mejora. ¿Cómo encaja el discurso y las miradas de hace más de cincuenta años en pleno siglo XXI? Creo que Mondragón tiene muchas cosas buenas, pero una de ellas no es la multiculturalidad y ese encaje es para mí un punto a mirar en una época en la que estamos y conforme pasen los años y las décadas seguirá. El avance de una organización va a seguir dependiendo del talento, pero también de la riqueza que va y viene desde otras latitudes, y eso quizá cada vez va a ser un mayor problema de Mondragón para atraer talento.Tiene mucho mérito lo que han creado,y yo lo valoro mucho, en ciertos ambientes es desde luego muy valorado y reconocido, pero cabe preguntarse si eso es algo atrayente para mucha gente con talento cuando quiere hacer un proyecto (profesional por una parte y de vida en la otra).. Me da que pensar, en un tiempo donde la globalización y los tiempos en los trabajos ya no son de por vida, creo que el modelo Mondragón va a tener problemas para atraer talento de fuera. He estado echado un vistazo, es curioso (o no), en su mayoría siguen siendo ofertas muy locales, casi todas son para el País Vasco, las de internacional por ejemplo son una minoría, para hacerse mirar. Si comparas con la mayor parte de organizaciones de más de 50.000 personas, la oferta de puestos de trabajo y de perfiles internacionales que Mondragón ofrece, es realmente insignificante.

Responder
Julen 19/03/2018 - 07:33

La tensión entre lo local y lo global está ahí, Iván. Ten en cuenta que las cooperativas nacen pegadas a su entorno geográfico cercano y eso condiciona porque ahí está su razón de ser. Creo que este es un tema muy interesante para debatir. Cómo mantienes el compromiso con tu territorio y miras al mundo. Una tensión compleja.

Responder
Juan Lizarzado 01/04/2018 - 00:05

Hola Julen… Gratos recuerdos de mi estadía en MU, me hacen leerte constantemente, y por su puesto cada lectura deja esa pregunta en el aire a la que como dicen «es complejo».
En principio, parece sí que hay una crisis de talentos, pero es paradójico, mientras nosotros admiramos (Latinos sobre todo) la enorme capacidad del País Vasco (su gente) de reinventarse, siento que «Los Vascos» no lo perciben, y por el contrario hay una enorme preocupación por encontrar el Santo Grial del Talento. Y ciertamente, la clave parece encontrarse, o al menos juega un papel preponderante, en la combinación o mestizaje de talentos. Por ejemplo, en Latinoamérica se generan cientos de miles de profesionales con innumerable talentos para diferentes espacios (empresariales, ejecutivos, sociales, culturales, educativos, etc, etc…); y sin embargo no se observa una plan para atraer parte de los mejores talentos que en esta parte del mundo se forman. Y créeme Julen, no siempre se esta mirando hacia las grandes metrópolis, pues también existe una enorme necesidad social, llamémosla desde el punto de vista sociológico, de identidad «territorial», que aunque parezca extraño es muy fácil identificar en el País Vasco (independientemente de sus marcados rasgos culturales), al menos en mi experiencia en Mondragón, me sentí muy a gusto y cómodo con la sociedad vasca. Por otros lado, la enorme crisis latinoamericana de empleos de calidad (trabajos dignos, bien remunerados, satisfacción personal, formación constante, etc.), ha provocado esa sensación de querer «brincar el charco»; y creo que allí existe una enorme oportunidad para refrescar el talento, combinarlo con otros «genes», y provocar esa transformación que produce y dinamiza lo nuevo.

Te felicito por mantener ese grato deseo de leer tu próximo escrito. Te reitero mi saludo y mi gratitud por los espacios de conversación y aprendizajes que nos brindaste en MU. Recuerdo con mucho aprecio «Tus Ladrillos».
Te envío una gran abrazo.
Juan / Caracas – Venezuela / WhatsApp +58 04165670917

Responder
Julen 01/04/2018 - 19:03

Me alegra saber de ti de nuevo. Para lo que te pueda hacer falta, ya sabes dónde ando 😉
Las distancias son cada vez más cortas, el «charco» cada vez es menos charco. Ánimo.

Responder

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.