Efímero

by Julen

Dust

Mientras tanto. Un momento por el que no preocuparse. A fin de cuentas, habrá muchos otros. Le doy vueltas y vueltas; no soy capaz de avanzar. Sé que es un instante, que no debiera preocuparme. Aislado, encerrado entre paredes de cristal. No quiero que vea, pero él vive irreverente y me quita la razón. Efímero, el momento se queda en el aire. Pero no sopla brisa. Y permanece.

El sol que entra por la ventana lo atrapa. Puedo verlo entre las motas de polvo. Inmóvil, ajeno a todo lo que pasa a su alrededor. Sin apenas importancia, sé que dejará de estar ahí de un momento a otro. Tan solo tengo que esperar. Paciencia, porque se disolverá. Y nadie sabrá que estuvo ahí.

La escena se dibuja en trazos gruesos. Podría ser cualquier otra. Comparte con sus hermanas una similitud inquietante. Al fondo se ve una escalera. Camino a ninguna parte, una escalera inmensa cuyos peldaños no te dejan avanzar. A cada paso que das el mundo nada sucede. Te miro y veo cómo vas hacia adelante mientras todo a tu alrededor acompasa su paso a tu ritmo.

Peldaño tras peldaño hasta que cuesta respirar. Entonces es cuando te detienes. Y el momento se vuelve efímero. Lo viste pasar. Pero no, no era nada que importase. Tan solo la sensación de que ese instante podría hacer cambiado el destino.

La imagen es de Joao Trindade en Flickr.

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