Hábitos

by Julen

Repetición
Agarrados como lapas. Los años refuerzan su sinsentido. Enormes cárceles de cristal sin puerta de salida. No hay camino que conduzca afuera porque no hay adentro. Se despliegan, omnipresentes. Te definen. Sabemos quién eres porque tus hábitos te delatan.

La camisa de fuerza no necesita hacer presión de ningún tipo. Ellos no son así. Nada de violencia, nada de amenazas. Dulces, encantadores, reconfortantes, te encierran en quien eres. Empiezan jugueteando y acaban esclavizando tu conducta. Prueba a salir. Pero, claro, no hay salida. Viven en ti.

De vez en cuando te lo preguntas. Quisieras que relajaran la forma en que te poseen. No es tanto renunciar a ellos cuanto permitir alguna cana al aire. Pero el tiempo cada vez te limita más. No hay alternativa. Y aunque la haya no eres capaz de probarla. Solo queda hueco a la imaginación. La realidad es tozuda: tus hábitos van ganando de largo la partida.

Así que un día te sientes atrapado. Sabes que no debería ser así. Hay otro mundo. Pero el tuyo es el que es. Te repites. El bucle vuelve al inicio. Y cada vez que gira la rueda eres un poco menos de lo que podrías ser. Por eso te revuelves. Inquieto. No hay forma. Ellos ganan. Siempre.

Artículos relacionados

2 comentarios

Rufino Lasaosa 24/09/2016 - 12:47

Que post más pesimista…
Lo único… ¿a qué te refieres a hábitos inconscientes o a costumbres?
El hábito es por sí mismo inconsciente, mientras que la costumbre es una elección y, como tal, se puede cambiar; siempre se puede elegir otra cosa…

Responder
Julen 30/09/2016 - 06:38

Lo que escribo los domingos en este territorio que denomino «Escapatoria» no tiene por qué regirse por la razón. A veces sale de dentro y evidencia contradicciones.

Responder

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.