La muerte de las clases medias

by Julen

chavsTengo que agradecer a Noemí Pastor que me haya puesto sobre la pista del programa de Salvados dedicado a la clase media. Quizá ya lo habéis visto y tengáis vuestra propia opinión. Yo después de verlo no hago sino pensar que todo cuadra. Que aquello que pasó en 2007-2008 y que desencadenó una crisis que primero llamamos financiera y luego sistémica no ha sido sino un paso más en la dirección equivocada. La postmodernidad galopa desbocada recordando con estruendo mediático que lo que nos pasa es lo que nos merecemos. Pero no tanto como colectivo, sino persona a persona. Eres lo que te mereces.

¿Solidaridad? ¿Sentido colectivo? Si acaso, descafeinado, muy matizado. Individualismo en red. Importa que seas capaz, que te mires hacia dentro y descubras que puedes. Sea por ti misma, por ti mismo o porque un coach te lo ha hecho descubrir. Pero el caso es que sientas que el futuro es tu responsabilidad, por muy triste o negro que pueda parecer. Y recuerda, no hay sitio para todos. Tienes todo el derecho del mundo a ganar a cualquiera que se ponga en el camino. Por las buenas o como sea.

Dicen que la sociedad contemporánea de este supuesto primer mundo se representa a través de un reloj de arena. Arriba los poderosos, abajo el resto. En el medio casi nada. La clase media desaparece. Claro que las dos partes no son, como ya habrás podido adivinar, de igual tamaño. La parte de arriba es diminuta a costa de que crezca la de abajo. Sí, la de arriba sigue necesitando a la de abajo, pero ya las arregla para que haga lo que tiene que hacer.

Owen Jones, quien ha publicado Chavs, y a quien entrevista Jordi Évole explica cómo allá en el Reino Unido todo empezó con Margaret Thatcher. Aquí no sé dónde se puede colocar el comienzo. Owen Jones subtitula su libro La demonización de la clase obrera. Dice al final de la entrevista que en realidad la lucha es porque no hubiera clases o, dicho de manera más amable, porque la desigualdad disminuya. Muy interesante todo lo que explica este tipo con pinta por cierto de Iñigo Errejón.

Sirve para pensar qué ha pasado con la clase trabajadora, de qué forma se configura la opinión pública o qué rol juegan los sindicatos. Un mundo complejo este en el que vivimos movido por la artillería mediática y que configura sus iconos a partir de sutiles propuestas siempre interesadas. En fin, demasiado goloso este libro como para no sucumbir a la tentación de leerlo, ¿no?

Artículos relacionados

18 comentarios

Noemí Pastor 14/12/2015 - 07:55

De nada. A mandar. 😉

Responder
Julen 18/12/2015 - 06:35

Toma la palabra 🙂

Responder

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.