¿Redes sociales o redes comerciales?

by Julen

Blackberries, Corvallis Farmers MarketJunto a Naiara Pérez de Villarreal tenemos diseñado un taller de redes sociales en Internet para alumnas y alumnos de segundo curso de LEINN. Es evidente que a día de hoy lo digital forma parte de sus vidas y también, claro está, del recorrido de aprendizaje que pretendemos que lleven a cabo. Si de lo que se trata es de aprender haciendo en las redes sociales tenemos un buen ejemplo.

Así que aunque también cacharreamos con las herramientas, la primera de las dos jornadas de cuatro horas en las que se estructura el taller, la dedicamos a pensar sobre estas cosas. Ya, pensar y hablar, no hacer. En fin, quizá se salga un poco del guión, pero en algún momento hay que detener la locomotora y ponernos a hacer crítica sobre el sarao que está montado.

Últimamente surgen noticias día sí y día también sobre los nuevos movimientos de los gigantes de las redes. Internet se ha convertido en un lugar donde sobre todo hacer negocio y la ciudadanía está allí presente. Las marcas lo saben y aunque casi todas procuran desarrollar sus canales de venta online en realidad la prescripción de verdad -si no la venta en sí misma- pasa por las redes sociales. Gran parte de la actividad de las empresas pasa por colocar contenidos que les sirvan, a través de los canales adecuados, para vender. En este panorama las redes sociales se convierten en medio para un fin.

Frente a ese uso comercial de las redes sociales, la ciudadanía también se relaciona a través de ellas. La tecnología de alguna forma emerge al servicio de la comunicación humana. A veces hasta se diluye por la cotidianiedad, ni nos damos cuenta de que está presente. Hablar por teléfono es hablar, eso es lo importa. Relacionarse e interactuar por cualquier medio social es lo que es, comunicación humana, y eso es lo que importa. Pero es cierto que cada vez hablamos más de marca personal, de reputación online y toda esa jerga proveniente de lo empresarial y que ahora se aplica también al ser humano individual.

Después está el asunto de los filtros, de los que ya hemos hablado aquí. ¿Vemos la realidad o solo aquella que interesa para que se cumplan los fines comerciales? Si las empresas son las que pagan (con dinero, me refiero) a Facebook es más que evidente que están esperando un retorno de su inversión. Así que Facebook debe orientar su actividad a que eso suceda de la mejor manera posible. Nosotras, nosotros, pagamos con nuestros datos y las empresas con su dinero. Así está montado el chiringuito.

Comento lo anterior porque de esto hablaremos en el taller. Pensando en que no pueden no usar las redes sociales pero buscando esa mirada crítica tan necesaria. Tienen que saber usar con criterio y no tanto porque sí. La huella digital deja una sombra demasiado alargada como para andarse a la ligera.

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20 comentarios

Juanjo Brizuela 22/09/2015 - 23:14

No es nada fácil el debate pero sí necesario para ese espíritu crítico.
Últimamente las redes sociales se parecen más al buzoneo tradicional. Quien me lo dijo me hizo qué pensar, y mucho. Y creo que no le falta razón. Para encontrar lo bueno, hay tanto que no sirve de nada.
¿pero tiene que servir para algo o simplemente como dices para que nos podamos comunicar? (aunque cada vez es más frecuente ver monólogos y monólogos)…
No sé, ando un tanto pesimista estas semanas

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