¿Nuevo inbox de gmail? Mejor pilotas tú la nave

by Julen

GmailNo sé cuántas habrán sido las ocasiones en que el típico gurú de turno había pronosticado la defunción del correo electrónico. El caso es que pasa el tiempo y esto sigue como antes, si no más repleto todavía de mensajes que van y vienen. Así que visto lo visto, Google nos propone delegar una buena parte del trabajo en su supuesta «inteligencia»: su nuevo Inbox. Porque lo peor que puedes hacer con el correo es no gestionarlo. Y no, no se va a autorganizar por sí solo, me temo.

Es cierto que gmail ya dio un paso cuando nos autoclasificó el correo que llegaba en varios bloques. Bien, un gran avance para la humanidad. Pero ahora el asunto es diferente con el nuevo Inbox que nos quieren vender. Ahora el asunto es permitir que sea la herramienta la que toma posesión de nuestro puesto de control. Y la pregunta es evidente: ¿ya lo controlabas o hacía tiempo que habías perdido el dominio sobre los mandos? Quizá si tu situación tendía al desastre a lo mejor el nuevo Inbox te puede organizar esta parte de tu vida. Pero ojo con las consecuencias.

Claro que el asunto crítico aquí es hasta qué punto conviene delegar o no en la tecnología. Sí, la tentación está ahí. Es más que evidente. Cada vez habrá más supuestas herramientas a nuestro servicio pero ¿conviene renunciar siempre a nuestra torpeza y a nuestras limitaciones? ¿Queremos que la tecnología decida por nosotras hasta todo aquello en que sea capaz de hacerlo? Insisto, la tentación vive en el piso de arriba y hay ascensor que te planta en él en un abrir y cerrar de ojos.

Así que no se trata solo de productividad personal -que también- sino de cómo mantenemos nuestra cabeza activa. Hoy en día parece que esto de la estimulación, física y cognitiva, tiene que ver con cuadros clínicos donde ya hay una enfermedad diagnosticada. Pero si esto sigue así y cada vez hay más tecnología que reemplace a nuestras capacidades, pudiera ser que inventemos la terapia (estimulación) contra una enfermedad que nosotros solitos nos hemos fabricado (dejar que la tecnología tome el control).

Claro que en el mundo ultraeficiente al que nos quieren conducir eso de que tú pilotes la nave de tu correo electrónico y asumas controles manuales te puede suponer más de una mofa por parte de los vecinos. Habrá quien te enseña cómo reluce su Ferrari, pasando a toda hostia, con perdón, por las curvas del difícil circuito de la productividad personal con el acelerador de su nuevo Inbox apretado a fondo. Pero no debería importarte. Quizá tú y yo con nuestras imperfecciones estamos previniendo futuras enfermedades degenerativas.

Nota de disculpa.- Lo reconozco: ni he probado el nuevo Inbox ni, de momento, falta que me hace. Y menos cuando se envuelve en una cosmética de «oscuro objeto de deseo«. Solo he leído artículos de gente de la que me fío. Y conste que sí, que aplico mis peores prejuicios. Ustedes me perdonen.

Artículos relacionados

3 comentarios

Jose Miguel Bolivar 10/11/2014 - 10:13

Esta nueva aplicación viene a cubrir una ¿necesidad? derivada de la falta de responsabilidad. Así de claro lo digo. El trabajo del conocimiento consiste fundamentalmente en decidir (Drucker dixit) y decidir bien exige revisar antes las opciones disponibles. Nosotros nos empeñamos en eludir esta responsabilidad siempre que podemos y preferimos que sea la tecnología la que nos diga qué tenemos que hacer y cuando. Google, y el resto del ecosistema tecnológico, solo hace de nuestra irresponsabilidad su modelo de negocio.
Abrazo!

Responder
Julen 10/11/2014 - 10:53

Pues se puede decir más alto, pero no sé si más claro. Ya haremos una asociación de afectados por Inbox :-))))

Responder

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.