Conocimiento en masa incomprensible

by Julen

9/52 : Le traité de non prolifération nucléaire - The nuclear non-proliferation treatyTanto esfuerzo, tanta insistencia en que el conocimiento se vuelva accesible para esto. Hemos creado un monstruo de millones de cabezas, cada cual dispuesta a replicarse en otras tantas. Imposible de abarcar, el conocimiento se volatiliza al convertirse en información disponible. La cantidad es tal que no sirve de nada. La angustia de saber que deberíamos poder acceder a él sin problemas y que debería sernos útil nos atenaza. Porque día sí y día también la realidad es tozuda: el conocimiento se vuelve ingobernable.

Da igual que insistamos. El monstruo ya hace tiempo que vive entre nosotros. Bien alimentado, crece y se reproduce en camadas cada vez más numerosas. Se sabe poderoso de la mano de unos humanos que lo idolatran. Hasta que algún día quizá no muy lejano se vuelva contra ellos. Incomprensible.

La masa de conocimiento acumulada se ha convertido en el arquetipo contemporáneo del desorden y el caos. En esa masa, a semejanza de los misteriosos agujeros negros cósmicos, se han hundido y disuelto progresivamente todos los mecanismos ortodoxos de ordenación: los temas de relevancia, la asignación de importancia, las necesidades que determinan la utilidad y las autoridades que determinan el valor. La masa logra que sus contenidos parezcan uniformemente incoloros. En esa masa, podríamos decir, todos los fragmentos de información fluyen con el mismo peso específico, y para la gente que tiene vedado el derecho a reivindicar su propio criterio, pero que se ve zarandeada por las corrientes opuestas de las afirmaciones contradictorias de los expertos, no hay manera evidente, y mucho menos infalible de separar el grano de la paja. Las parcelas de conocimiento forjadas, en esta masa, para consumo y uso personal sólo pueden evaluarse por su cantidad; no hay manera de comparar su calidad respecto de otras parcelas de la misma masa. Un bit de información equivale a cualquier otro. Los concursos televisivos son un fiel reflejo de esa nueva condición del conocimiento humano: toda respuesta correcta otorga al concursante el mismo número de puntos, independientemente del tema de la pregunta y de su «peso específico» (¿cómo se podría medir ese peso específico?).

Zygmunt Bauman en «44 cartas desde el mundo líquido»

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20 comentarios

La humildad de la reflexión | enPalabras | consultoría 23/11/2014 - 10:02

[…] “conocimiento en masa incomprensible de ese monstruo de millones de cabezas” al que se refiere Julen Iturbe me ha recordado una secuencia de pensamientos desarrollada por Jorge Wanenger en su A más cómo, […]

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La humildad de la reflexión | IG | In-formación 23/11/2014 - 10:23

[…] “conocimiento en masa incomprensible de ese monstruo de millones de cabezas” al que se refiere Julen Iturbe me ha recordado una secuencia de pensamientos desarrollada por Jorge Wanenger en su A más cómo, […]

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Jesús 23/11/2014 - 14:15

Solo a través de la experimentación, la observación y la reflexión, ¿no?

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Julen 23/11/2014 - 17:53

Mejor que con la fe, desde luego, aunque quizá haga falta algo de esta también 😉

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