#TransMurciana 14 y última etapa: Murcia-Lo Pagán

by Julen

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Murcia estaba en fiestas. Se veía que la ciudad estaba convaleciente al llegar. A Ángel le extrañaba que no estuvieran bares y comercios en marcha cuando llegamos a última hora de la mañana. Pues eso, la razón es que Murcia se coge la semana posterior al Domingo de Resurrección para algarabía general: las fiestas de primavera.

En mi caso por la tarde pude degustar algunos productos típicos en una de las casetas junto a mis estupendos anfitriones de Regenera. Entre otras delicias degusté michirones, unas habas bien hermosas cocidas con los habituales aderezos del cerdo, y paparajotes, un dulce tipo buñuelo con hoja de limón en su interior. Y me quedé a las puertas del zarangollo, un revuelto de huevo y calabacín.

Mientras, Ángel marchó a media tarde de nuevo en autobús para Gandía. Tiene su medio IronMan en Los Arenales del Sol, en Elche, este sábado. Suerte, compañero. A dejarlos atrás en cada cuesta 🙂

Al volver para el hotel, que estaba al otro lado del Segura respecto a la catedral, me topé con un gran desfile de carrozas de flores y una gran cantidad de chavalería desfilando con sus disfraces. Vamos, en plan carnaval… pero eso ya fue, ¿no? Hoy viernes hacen entierro de la sardina y se ve que la víspera se animan con el desfile.

Ya en ruta esta mañana el camino nos acerca al Santuario de la Fuensanta, a las puertas del Parque Regional El Valle y Carrascoy. La carretera se convierte en pista y asciende poco a poco hasta los casi 500 metros de altitud con unas vistas estupendas de la ciudad de Murcia. Me encuentro con gente haciendo senderismo y también con algunos ciclistas. Se ve que es zona de esparcimiento muy frecuentada.

La rápida bajada nos saca del típico pinar para introducirnos en tierra de cultivos de secano. Aunque será por poco tiempo porque de nuevo la ruta asciende hacia el puerto del Garruchal y, como siempre, eso quiere decir pino carrasco. La subida recorre un tramo por carretera para luego meternos en una pista muy entretenida y ofrecernos la primera vista del Mediterráneo al coronar el puerto de Ginovinos.

La siguiente bajada nos conduce hacia una tremenda urbanización con su campo de golf antes de llegar a Sucinas. El viento sopla bastante fuerte hoy y aunque al final de la etapa lo tendré de espalda, en esta zona los kilómetros se hacen bastante duros. Cómo no, avituallamiento. Esta vez en Sucina donde la terraza del Bar combina una mesa con cuatro rumanos, una pareja inglesa, dos tipos que creo son alemanes y unos lugareños. Ah, y yo con mi mismidad, claro.

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Subida suave con viento en contra. O sea, subida agobiante. Nada del otro mundo porque son solo seis kilómetros y luego toca bajar con viento de culo. Además, la última parte nos introduce en la rambla del Río Seco, todo un regalo. Se trata de un sendero precioso que va escondido dentro de una estrecha zona verde. Luego se ancha al acercarse al mar y se convierte en un túnel entre juncos de gran altura. Muy bonito.

Y ahí está: el mar. Llego a la costa de la que partí hace catorce días. Un zumo de naranja en una terraza para dejar pasar un poco el rato y repasar lo que más me ha cautivado de la ruta: las calas por el GR92, la inmensa bajada acompañando al río Alhárabe, el increíble pantano de Algeciras, los naranjos y los azudes del valle de Rico te, las tostadas con aceite y tomate, la pasión de la chavalita del Paso Azul de la semana santa en Lorca…

En fin, terminamos la ruta. Comienzan los recuerdos. Gracias por estar ahí.

Distancia recorrida: 81,77 km. Desnivel acumulado: 991 m. Tiempo de pedaleo: 4h 55min.

Enlace a datos completos de la etapa en Garmin: http://connect.garmin.com/activity/486694792

Post generado desde smartphone.

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2 comentarios

Alberto 26/04/2014 - 00:24

Eh, se te olvidaron, que yo sepa: la aparente soledad del Mar Menor, el bocata del Puerto del cabo de Palos, la peña bilbaina y el atún rojo de Aguilas, el Cristo de la Unión, el olor de Escombreras, la peña que desayunaba en aquel bar de la tortilla recién hecha, lo roto de Lorca y el bacalao de la cena sin luz, el jabalí camino a Caravaca y sus procesiones, los conejos en el camino, el Nevazo, los dos fieros perros que ni se acercaron, la vía verde hacia Bullas, los tamboristas y su ruido en Mula , los y las y el y ellos …..

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Balance de la #TransMurciana | Consultoría artesana en red 27/04/2014 - 09:29

[…] La ruta en Murcia proporciona bastante variedad. La costa a través del sendero GR92 nos ha dejado vistas espectaculares. Atrapar la luz del amanecer sobre un mar en calma con una cala desierta a tus pies no tiene nombre. Las ramblas nos conducen a la aridez y a formas caprichosas del terreno producto de la erosión. El pino carrasco es la sombra que se disfruta en cuanto ganas algo de altura. El pantano de Algeciras es un regalo para la vista. El río Segura ofrece un corredor verde entre juncos que hacen de autopista para pedalear. La bajada junto al río Alhárabe hacia Moratalla te sorprende con sus inmensos paredones de roca. En fin, variedad. Alberto ha añadido unos cuantos detalles más en este comentario. […]

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