La empresa: ¿el problema o la solución a problemas?

by Julen

Problem, Solution, Result...De un tiempo a esta parte las empresas «modernas» se venden como una manera de resolver problemas. Si antes el triángulo misión, visión y valores se movía alrededor de la excelencia y la satisfacción de necesidades de los clientes, ahora la empresa busca nuevos bebederos. Y ha encontrado uno que parece destinado a ser el santo grial mientras dure la fiebre. La empresa se presenta como la vía para resolver un problema. Y si el problema tiene hondas raíces sociales, mejor. En esta línea podéis leer a Raúl Tabarés en Innpulsos: La mejor forma de crear una empresa es solucionar un problema. Lógica aplastante.

Que esta manera de entender la empresa ha alcanzado notoriedad es evidente. Michael Porter tiene ya su charla TED para explicar por qué la empresa es la mejor manera de resolver esos problemas sociales. Tenéis el video más abajo. Entre otras cosas insiste mucho en la escala. Una ONG, una organización social no son capaces de acceder a los recursos que hacen falta para ampliar el foco y crecer, mientras que una empresa está diseñada para eso.

Los problemas, fuente de negocio. Nada de resolverlos sin esperar nada a cambio. Esto es de tontos. Y como dice la publicidad de una de esas grandes cadenas de tiendas de centro comercial, «yo no soy tonto». La empresa no es tonta. ¿Dónde se puede pescar? Pues allá vamos, a por peces.

Surge así un nuevo tipo de empresa, que basa su prestigio y su ascendencia ante la gente porque es capaz de resolver problemas. Eso sí, tienen que hacer negocio porque si no, no hay empresa. Pero ven en el negocio la forma en que resolver la injusticia. Cómprame un par de zapatos, que destinaré otro tanto para que gente del tercer mundo pueda calzar otros. Eso es TOMS. ¿Cómo no comprarte entonces esos zapatos que ofreces? Sería un desalmado si se los compro a la competencia.

Y al mismo tiempo, ¿acaso no es positivo que alguien tenga esa visión del mundo? ¿Por qué no va a contribuir a resolver un problema con su empresa? ¿Quién soy yo para poner en duda esa loable intención? No, no es fácil situarse en este mundo paradójico. ¿ Hay que empresarializar la solución de problemas? Las modernas loas al emprendizaje juegan mucho en este terreno porque proporcionan motivación extra a quienes quieren poner en marcha negocios con sentido social.

Cierto tipo de empresas, todos lo sabemos, son el problema. Lo que está pasando ahora con las eléctricas, ¿qué es sino una evidencia de que están para ganar dinero? ¿Qué esperan los accionistas de las empresas en las que invierten? Ganar dinero. Eso son (también) las empresas. Pero ahora otro cierto tipo de empresas se nos presentan como la solución a los problemas. No son el problema, son la solución. Y ambos modelos conviven: quienes son problema y quienes parecen ser solución.

Cuidado con el marketing. Que ya veo cómo le brillan los ojos para transformar empresas-problema en empresas-solución. Y miedo da.

Artículos relacionados

10 comentarios

Iñigo Blanco 31/12/2013 - 11:36

Kaixo Julen!

Sí! Un tema apasionante! Wow!

No tengo duda que el significado y el modo de operar de la empresa cómo la conocemos ha perdido su sentido, por eso es peligroso animar a crear empresa sin una profunda reflexión previa. Obviamente el emprendizaje social parece la propuesa más interesante para tratar y resolver problemas sociales. Pero de todas formas creo que tenemos que rediseñar la biología misma de la empresa y del emprendizaje para que la empresa no acabe siendo un problema per se!

El otro día hice un pequeño acercamiento a proponer una biología de empresa que a priori en mi cabeza tiene más sentido que la actual: https://whitekaos.wordpress.com/2013/11/18/biologia-del-emprendizaje/

Una especie de autopoiesis empresarial… 🙂

Feliz 2014! Y MIL GRACIAS por compartir tantas aventuras y reflexiones en este 2013.

Abrazos!

Responder
Julen 31/12/2013 - 17:16

Muy interesante, Iñigo. Mirar a las leyes de la biología siempre es útil. A fin de cuentas, han demostrado su capacidad para aguantar el paso del tiempo. En todo lo que expones (lo acabo de leer ahora) creo que hay muchas lineas de trabajo que pueden aplicarse según casos. También veo muy cerca, como es evidente, todo del enfoque del procomún, la economía p2p o la economía del bien común. Bueno, nos seguimos encontrando. De momento, me llevo a delicious tu artículo.
Que te venga bonito este 2014 🙂

Responder
Juan Sobejano 31/12/2013 - 12:07

Muy interesante, Julen, como siempre. Hay una pregunta que me surgía al leer tu artículo, seguramente fruto de mi desconfianza neuronal 🙂

Si la resolución de un problema social es el principal valor de una empresa ¿hasta qué punto no le puede interesar a esa empresa que ese problema social permanezca?

Creo que hay un cierto riesgo de «mercantilizar el dolor» si conceptos como la innovación social, las empresas B o las empresas sociales empiezan a comportarse de un modo demasiado «tradicional»

Responder
Julen 31/12/2013 - 17:05

Buffff, entras en territorio delicado. El marketing del problema incluye que no se desaparezca, buena lógica. Da para pensar. Muy buena línea argumental abres. Seguiremos dándole vueltas.

Responder
Juanjo Brizuela 01/01/2014 - 12:02

Julen… me ha desconcertado un poco tu post. Mucho no lo pillo, la verdad.
No me parece mal que las empresas quieran contribuir a «solucionar» algún problema… me parece hasta absolutamente necesario. Otra cosa es qué tipo de «venta» se haga de eso. Eso sí. Ya empezamos a vilipendiar el término del marketing como un coco que aparece para beneficio de la empresa.
¿qué hacemos entonces con todo eso de la RSC? ¿qué hacemos con todo eso de la coherencia de las organizaciones?
Me da qué pensar y bastante la verdad.

Responder
Julen 02/01/2014 - 05:41

Egun on, Juanjo.
Mira lo que dice Juan, por ejemplo. Lo que apunto en el fondo es que «empresarializar» la solución de los problemas puede (no tiene por qué suceder, pero puede pasar) conducir a una resolución un tanto curiosa donde el ánimo de lucro se imponga. ¿Por qué no deberían solucionarse desde otras instancias «sociales» y no «empresariales»? La irrupción de la empresa hay que contemplarla con cautela.
Tiempo al tiempo.

Responder
Juanma 03/01/2014 - 00:23

Hola Julen, me ha gustado mucho tu post.
Lo que más miedo me da es la frase que citas de Porter «la empresa es la mejor manera de resolver esos problemas sociales» y esa mercantilización de los problemas. ¿Llegaremos a solucionar problemas demográficos como la natalidad vía empresas? (un ejemplo futurista-pesimista)
Debo decir que cuando leo/escucho la definición de «empresa social» y sus fines sociales además de mercantiles(sin rentabilidad no hay empresa que sobreviva) me surgen muchísimas dudas. Probablemente por la deriva del propio concepto que ha llegado a un punto en el que no dice nada y permite incluir esa «mercantilización del dolor». Si el concepto sigue retorciéndose me pregunto qué empresa no será social. CocaCola alegra la vida a la sociedad, Nike nos ayuda a superar nuestros límites, Movistar nos acerca a las personas más queridas…
Estoy de acuerdo contigo en que la retórica que se sigue parece llevarnos a una mercantilización de ¿las soluciones?
Por cierto, supongo que ya lo habrás leído, pero el cambio del que se habla en Ecuador creo que abre una pequeña esperanza:
http://www.eldiario.es/turing/Ecuador-Rafael_Correa-FLOK_Society-buen_vivir-sumak_kawsay-procomun-p2p-copyleft-patentes_0_209279080.html

Responder
Julen 03/01/2014 - 05:25

Pues sí, lo «social everywhere» está aquí. Ya no hay forma de quitárselo de encima porque es la manera «emocional» a través de la cual se vende. Hace tiempo que el producto físico dejó paso a esta nueva interpretación. Ojos abiertos y alerta. Gracias por el enlace.

Responder
¿Enseñar a emprender? | Consultoría artesana en red 04/01/2014 - 06:24

[…] La transversalidad es una respuesta lógica. Diría que necesaria. Pero no parece suficiente. Hay que trabajar con otras metodologías y traer a las aulas otros “modelos” docentes. Es más fácil creer en quien ha emprendido y le ha ido bien. Pero este darwinismo social de “pocos son los elegidos” presenta zonas oscuras. Cuidado con los modelos que traemos. En vez de mostrar cooperación emerge el valor de la competencia. Eso sí, apuntando sin sonrojo alguno a los problemas sociales cuya resolución marcará la competitividad de la propuesta emprendedora. […]

Responder
La oportunidad de negocio de los @miserable_men | Blog de TecnoPCX 26/06/2014 - 19:09

[…] de los porteadores, transportistas, acompañantes, de sus clientes. Y me he acordado de esta fantástica charla de Porter reclamando el papel de las empresas (y no de organizaciones sin ánimo de lucro) para resolver los […]

Responder

Responder a Juanma Cancelar respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.