Viaje a la Corporación Mondragón en el País VascoEn mi experiencia como socio de cooperativas de MONDRAGON, solo en una ocasión tuve oportunidad de asistir al congreso anual. Me pareció que aquello representaba un hito simbólico de gran relevancia:  un lugar donde este gigantesco grupo empresarial volvía a sentir la cercanía de la gente. Porque, se quiera o no, avanzar hacia las cien mil personas trabajando hace perder la noción de lo cercano. El congreso «tiene como función establecer los criterios estratégicos por los que se administrará la Corporación, mediante la planificación y coordinación de sus unidades de negocio». Está compuesto por delegados de las cooperativas y suele reunirse en Mondragón una vez al año con carácter ordinario. Estar allí siempre me pareció toda una experiencia.

Ayer lunes tenía lugar un nuevo congreso y la noticia de lo acontecido se ha movido rápido: Mondragón crea un fondo de apoyo a Fagor Electrodomésticos. Así que supongo que no habrá sido un congreso cualquiera. Quizá sea el que marque un antes y un después. La situación de Fagor Electrodomésticos condiciona el futuro. No digo nada nuevo porque la prensa lo viene recogiendo desde hace tiempo y cualquiera que viva en esta parte del sur de Islandia casi sin querer sabe del asunto. Ni los resultados ni la reputación de Fagor Electrodomésticos pasan por sus mejore días.

Pero según parece, el congreso ha hecho lo que tenía que hacer. Ha tomado la decisión de retorcer la solidaridad entre todas las partes que componen el conjunto de la corporación. Ese fondo de 70 millones de euros sale de los beneficios de las cooperativas o de bajadas de los salarios. Complicadísimo asunto el de que quienes van bien cedan parte de su beneficio a quienes van peor. Sí, va en la esencia de las cooperativas de MONDRAGON, pero todo el mundo sabe la tensión y la mala uva que va creciendo cuando hay que dar dinero a los vecinos. Las cosas como son y evidencias hay muchas.

En realidad el argumento que avala la conveniencia de este mecanismos es muy simple: hoy por mí, mañana por ti. En la foto de la competitividad hay veces que toca estar más arriba y otras más abajo. La memoria es frágil y cuando las cosas van bien durante un tiempo, parece humano olvidar aquella otra circunstancia en la que todo era negro. Las culpas enseguida empiezan a extender una mancha de aceite que cuesta luego disolver.

De aquel congreso en el que estuve recuerdo la escenificación. Una enorme presidencia que imponía quizá demasiado. Entonces -hace ya unos cuantos años- también recuerdo que solo había una mujer allá arriba. No sé cuántas habrá ahora. Me pareció un sitio ceremonioso, una obra en la que todo había tenido sus horas de preparación. Nada dejado a la improvisación. Supongo que no puede ser de otro modo.

En fin, que sea para bien, que dicen en mi familia. El momento parece excepcional y la medida también parece serlo. Pero por detrás, en los cimientos, seguro que hay elementos que conviene cuestionar. Causas y síntomas se confunden en un panorama extraordinariamente complejo. Menos mal que las cooperativas pueden llegar a articular estas medidas y dar ejemplo de que mantienen el tipo. Aunque siempre habrá opiniones para todos los gustos. Porque diversidad creo que también la hay. Esperemos que todo vaya a mejor…

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4 comentarios

Iván 14/05/2013 - 15:23

La verdad que es todo complicado con la que está cayendo ¿no?. Pero creo que tiene mucho mérito todo eso de la solidaridad inter cooperativa, aunque tiene lecturas de todo tipo claro, dependiendo como en tantas otras cosas de la vida de que a uno le toque dar o recibir 😉

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Julen 15/05/2013 - 04:50

Sí, yo también creo que tiene su mérito. A ver qué sucede en los próximos meses porque se va a poner a prueba la solidaridad entre las cooperativas.

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Josu O. 14/05/2013 - 19:21

Por la parte que me/nos toca creo que ha sido una decisión que va a marcar un hito en la historia de la Corporación.

Nuestro modelo de gestión cooperativo tiene sus luces y sus sombras y como siempre todo es según el color del cristal con que se mire pero el que la decisión haya sido UNANIME en un tema tan peliagudo como este me hace sentir verdaderamente orgulloso.

En este sentido hay que felicitar a la Comisión Permanente por haber sabido hacer llegar a todas y cada una de las cooperativas de manera diáfana la situación y a estas por obrar en consecuencia. Como dijo el Presidente en el Congreso «nos llamarán bichos raros» pero esta situación en otro modelo de gestión ya sabemos como se hubiera resuelto ¿no?

Pero no echemos las campanas al vuelo, hay muchas cosas que mejorar en el día a día y un futuro incierto en el horizonte. Quizás haya que volver la mirada a las enseñanzas de Arizmendiarrieta. Ya lo decía el otro día Rafael Correa Presidente de Ecuador en una entrevista en Berria: «XXI. mendeko erronka nagusia da gizakia kapitalari gailentzea» (El mayor reto del Siglo XXI es el triunfo del ser humano sobre el capital) y en este tema aunque partimos con ventaja deberemos seguir aplicándonos.

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Julen 15/05/2013 - 04:52

Como le decía a Iván, vamos a tener que estar atentos a lo que ocurre en estos próximos meses. Desde luego que puede ser un ejemplo pero también es verdad que las tensiones van a seguir estando ahí y seguro que van a poner a prueba la solidez de la decisión. Esperemos que todo se vaya arreglando porque si no…

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