Aunque desde fuera os pueda parecer que aquello que dije de que este blog entraba en acción mutante se ha parado, nada más lejos de la realidad. Con Naiara seguimos trabajando en el rediseño de este blog para que se transforme «en otra cosa». El problema soy yo, que actúo como cuello de botella, ante la autoexigencia de recategorizar el contenido para ayudar a quienes lo visitáis a navegar mejor entre lo que os pudiera interesar.
El gran problema -fácil de adivinar- es la cantidad de material que tengo enfrente. Además, a esos más de dos mil artículos se le añade el hecho de que me cuesta mucho separarlo en cajas estancas. Pero aunque para evitar ese problema tenemos las etiquetas, también es cierto que parece lógico mostrarlo en cajones diferentes, ¿no? En esto ando, suave suave.
Como consecuencia de mil y una vueltas al contenido producido hasta la fecha, la nueva versión de este sitio web contendrá cinco territorios. El concepto «territorio» me gusta en la medida en que lo entiendo como un lugar maleable, sometido a constante reinterpretación por quienes lo habitamos. No es un lugar físico, aunque también. Encierra paradojas y con él creo que puedo proyectar mejor mis ideas. Los describo a grandes rasgos al tiempo que los encierro en una tabla donde sé que sufren constreñidos a sus celdas respectivas. Es solo un ejercicio temporal 😉
2 comentarios
Pues suerte con el ir poniendo en orden los 5 territorios 😉
¿Orden? Me temo que es una constante tendencia al caos jajajaja
¡¡¡¡Y no ha hay nada que podamos hacer en contra!!!! Este sitio tiene vida propia 😉