Juan Varela, alguien a quien si yo fuera tú leería sí o sí para comprender el alcance social de las tecnologías, ha escrito en Estrella Digital el artículo Democracia en tiempo real. Con varios ejemplos de hace unos pocos días, nos viene a decir que el poder político ha encontrado un contrapeso a sus posibles desmanes: twitter. Nos pone, entre otros, los ejemplos de #eurodiputadoscaraduras para el asunto de los vuelos en business de nuestros representantes en Europa o de #manivictimas como debate alrededor de las asociaciones de víctimas a cuenta de la manifestación del otro día en Madrid.
Yo creo que hay aquí algo delicado: la exclusión social de quienes o no saben o no pueden twittear. ¿O quizá la de quienes no quieren? Desde luego que la comunicación en tiempo real, como apunta Juan Varela citando a Clay Shirky y a Howard Rheingold, es un poderoso elemento de movilización. Pero no hay que olvidar que trasladar a estos terrenos la democracia pasa por interfaces que no son universales.
De acuerdo en que una pancarta, una manifestación a pie de calle o que te encadenes a la verja de un gobierno militar son actos que también requieren ciertos artefactos, pero creo que estamos ante un asunto con el conviene ser crítico, muy crítico. ¿Los trending topics son inteligencia de las multitudes o son el resultado -también- de importantes campañas mediáticas? ¿Se puede pagar por un trending topic y trabajar con un ejército de agencias de social media para crear una realidad paralela que ahora resulta que es «la realidad» porque twitter así lo dice? Lee el capítulo sobre la configuración de agendas públicas en el último libro de Manuel Castells y ponte nerviosa.
Simplificar la realidad ha servido, sirve y servirá. Le valió a Google con su caja de texto para buscar lo que quieras y le vale a twitter para que dejes tus 140 caracteres. Simplificar el mundo funciona. Hay buenos y hay malos. Hay una lista de trending topics y hay millones de asuntos que quedan ocultos, fuera de los medios. Economía de la escasez a ritmo de nuevos medios sociales. Lo mismo de siempre, el mismo perro con distinto collar.
¿O no? ¿O resulta que ahora la gente puede lanzar un trending topic para cambiar el mundo? Twitter mediante, el mundo-consumo en que vivimos reconoce que es a través de medios privados como se construye la rebeldía y la denuncia. A mayor gloria de las finanzas de Twitter, Inc. una compañía con base en San Francisco y fundada en 2006. No es una ONG, ¿es esta una empresa del cuarto sector? Hagan juego, señores, escriban sus 140 caracteres, que la banca siempre gana y ustedes pueden adquirir parte de su felicidad y de su poder en la tierra.
6 comentarios
La democracia real necesita mucho más que 140 caracteres para el debate, discusión y deliberación……..creo que es de Oscar Wilde eso de que la democracia necesita de muchas tardes libres. Aunque ahora que lo pienso creo que él se refería al socialismo, pero se le puede aplicar también a la democracia.
Creo que los medios técnicos para que haya una democracia real, directa y sin intermediarios existen hace mucho tiempo, lo que no existe es ningún interés de la clase política para que se desarrolle, porque supondría cerrarles el chiringuito, del que tan bien viven algunos.
No sé muy bien a qué llamamos «democracia directa», pero como dice Rafael se necesitan muchos más que 140 caracteres. La lucha más espectacular por la democracia hoy se libra en el norte de Africa y la revolución, como siempre, la hacen los «cuerpos» en sus «espacios» (la plaza, el campamento, el lugar de la oración, el bastión…).
Vale que las redes sociales ayudan, pero sería obsceno, viendo lo que estamos viendo, atribuirles un poder taumatúrgico.
Comparto la opinión de Jordi, realmente se tiene interés por parte de las entididades sociales y de los representantes políticos que esos suceda…
Hoy la lucha como dice Alfonso, se desarrolla en el norte de Africa donde la revolución se desarrolla a pie de calle sin más preámbulo que la pura y dura existencia.
Lo que si ayuda las redes sociales en abrir un espacio para poder expresarse.
Saludos.
¿Qué es democracia directa? http://es.wikipedia.org/wiki/Democracia_directa
Clickar un «me gusta» o retuitear algo sentado en un sillón sin mojarte es muy cómodo y no obliga. No hay que olvidar que la persona que, sin querer, revolucionó Túnez no lo hizo a través de las redes sociales. Fue quemándose a lo bonzo.
Mi madre, muy refranera ella, dice a colación de estos temas «Por Navidad, todos a Guadalupe van. Y luego, va el que va». Ole. 🙂
Gracias, Julen. Me haces reflexionar. En un momento de la lectura se me ha venido abajo el mundo idealizado que estaba construyendo en mi cabeza, queriendo creer que a través de las nuevas Social Media, el mundo sería más justo. No había pensado en que también hay gente que maneja estos medios y que puestos al servicio de intereses económicos y políticos pueden «enredar» la realidad, tirando del hilo que más les interesa, con mucha fuerza además.
Gracias por devolverme a la realidad, compleja y rica. Difícil de entender para mí a veces y en constante lucha de fuerzas. Seguiré pensando en que, a pesar de todo, cada día nuestra especie es un poco mejor. Seguramente como tú también opinas.
Un abrazo de Prudencio. Espero tener pronto la posibilidad de reunirme con vosotros en un encuentro de Consultores Artesanos. Estaré al tanto.