¿Es la consultoría artesana una consultoría abierta?

by Julen

Abierto todo el año...¿Dirías que las Indias Electrónicas o Blobject son organizaciones que practican la consultoría abierta? ¿Dirías, por otra parte, que la artesanía aplicada a nuestro trabajo como consultores debería ocuparse de «proteger» al cliente para que aumente su confianza? ¿La deontología profesional de la consultoría debe garantizar la privacidad y la confidencialidad de aquello con lo que se trabaja? No tengo respuestas claras ni las preguntas ni las respuestas, pero es un tema sobre el que quiero seguir trabajando. ¿La consultoría artesana debe ser abierta por defecto?

Creo que la consultoría abiertasólo tiene sentido para un determinado tipo de clientes. Creo que la consultoría artesanasólo tiene sentido para un determinado tipo de clientes. Sí, son las mismas frases y en ellas sólo cambia una palabra. ¿Pero la consultoría artesana debe ser necesariamente abierta? Mi respuesta: sí en la mayor parte de las ocasiones. Lo importante es la actitud. La transparencia como un norte de la gestión del proyecto. La transparencia por defecto, aunque luego según casos convendrá no ejercerla.

Una de las paradojas de la economía abierta es la de trabajar la privacidad mientras buscamos estándares abiertos. Y el camino es un trabajo conjunto con nuestros clientes para ir abriendo la lata del conocimiento y que la sociedad pueda apropiarse de él para reutilizarlo. Sí, pero, ¿la remezcla de cualquier contenido? La lógica me dice que no. Sin embargo, la lógica también me dice que intentemos compartir la mayor parte de lo que hacemos. No manejamos secretos militares; así que espero que cada vez lo podamos hacer en más y más ocasiones. No hay que olvidar la preeminencia de lo cerrado en el paradigma del management actual.

Esto conduce inevitablemente a que sólo podemos trabajar bien con un determinado tipo de cliente, lo cual no es desvelar nada nuevo bajo el sol. Todas las empresas tienen clientes con los que trabajan mientras que otra parte del mercado les queda ajena. En el caso de la consultoría artesana, gran parte del mercado se queda al margen. No importa. Porque nuestro potencial mercado es inmenso y creo que tenemos la suerte de poder buscar cierto tipo de cliente.

Al margen de nuestro interés propio, la realidad es más sencilla: cierta parte del mercado se acerca de forma natural a nuestro modelo. Por la razón que sea (pueden ser muy variadas). Creo que tenemos cierto atractivo. Dicho esto con la mayor de las humildades. Sí, nuestro enfoque contenido, mirando más a la persona, hablando del orgullo por el trabajo bien hecho -en definitiva, lo que encierra la declaración artesana– nos ayuda a ser interesantes para cierto tipo de cliente.

Incluso creo que un cliente natural es la Administración Pública. No toda la Administración, pero sí creo que hay una cierta parte de ella, la que mira al emprendizaje mediante modelos alternativos, que puede estar tentada de trabajar con nosotras/os. Porque nuestro modelo, en su diversidad, está mirando a una reapropiación contemporánea del sentido del trabajo. Y queremos hacerlo desde una óptica diferente, de poder real de la persona frente a sus circunstancias. No nos hacen falta grandes herramientas para ello. «Sólo» deben unirse nuestra experiencia y la convicción personal de quienes quieren poner en marcha proyectos empresariales que sean vehículo de autoexpresión. Así de simple, así de complicado.

Y este tipo de consultoría no puede ser cerrada por defecto. Las experiencias de trabajo que desarrollamos deben ser cada vez más transparentes. Tenemos que colaborar con nuestros clientes para mostrarles cómo podemos abrir el conocimiento para que otra gente se aproveche de ello. ¿Es una labor social? Pues va a ser que sí. Tampoco tiene grandes ambiciones; sólo mostrar una manera de hacer las cosas. Otra manera. Ni mejor ni peor. Pero otra manera. Y abierta, mucho más abierta de lo que suele ser la norma.

Si trabajas en consultoría artesana, deberíamos ver licencias alternativas al copyright, ¿no?

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6 comentarios

Rafael Javier Rodriguez Sanchez 02/02/2011 - 10:46

Pues me alegraría enormemente que muchos de los grandes clientes de los consultores artesanos fueran Administraciones públicas………la necesidad de racionalización del gran dinosaurio es fundamental si queremos que se empiece a considerar la «eficiencia de lo público» (que en principio, nos pertenece a todos – ya sé que habría mucho que hablar al respecto – ) frente a la «eficiencia de lo privado» (que por su caracter intrínseco favorece a unos pocos, sus accionistas)

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Julen 03/02/2011 - 07:35

@Rafael, en realidad la pequeña trampa que hacemos es que no trabajamos para la «Administración Pública» sino para personas concretas que en sus áreas de actividad descubren que pueden contar con esta pequeña parte del mundo: los pequeños consultores artesanos. Lo veo más como oportunidad concreta que como «hábito» de la Administración.

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Germán 02/02/2011 - 11:26

Yo me encuentro más a gusto trabajando con empresas privadas. No me llevo mal con la administración pero creo que la empresa tiene otra tensión con los dineros que gasta en un consultor artesano, sobre todo cuando estos dineros los pone directamente de su cuenta de explotación.
Las empresas privadas lo son también en sus ganas de compartir la información que generan. Por ello, creo que una tendencia a la transparencia no se traduce en todos los casos con un deseo de trabajar «unicamente» con contenidos transparentes.

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Julen 03/02/2011 - 07:34

@Germán, para gustos los colores. Menos mal que somos diferentes y estamos llenos de matices 😉

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gallas 02/02/2011 - 23:22

Voy a decir una tonteria. Esta es mi gran descubrimiento de la jornada del otro día. Nuestro (entendamos esta primera persona del plural en el contexto de subidon artesano) sello más diferenciador es que provocamos procesos dónde ponemos en valor los conocimientos y potenciamos su cruce, contraste y apertura.
Siempre dentro de la organización y apoyando con pasión el contraste con todas las personas que están al otro lado del muro de nuestras organizaciones.
Eskerrik asko

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Julen 03/02/2011 - 07:33

@gallas, a mí nunca me ha cabido duda al respecto, «por defecto» deberíamos compartir lo que hacemos. Porque lo importante es que lo que perseguimos es un beneficio social más amplio que el estrictamente remitido al proyecto/cliente con que trabajamos. Dicho más claro: con el mazo dando (proyecto/cliente) y a dios rogando (abriendo contenidos).

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