Inteligencia competitiva de salón

by Julen

Hoy terminaremos de preparar el material para el segundo taller sobre Inteligencia Competitiva 2.0 a pie de calle que impartiremos la semana que viene en Vitoria. Tras los errores cometidos, hemos dedicado tiempo a repasar el enfoque, hacer autocrítica y eso ha conducido a introducir ciertos cambios. No sustanciales, pero esperamos que suficientes para que quienes asistan queden satisfechos de la conversación. A lo largo de esta semana compartiremos por aquí el material.

No obstante, quería compartir una reflexión que tiene que ver con la forma en que manejamos información para tomar decisiones en las empresas. Hoy en día hay mucho escrito sobre los «sistemas» de inteligencia competitiva (casualidad este enlace que vi ayer a través de Manuel Gross). Casi siempre haciendo alusión a los procesos de toma de decisiones basados en una gestión ágil de la información.

Sin embargo, ¿cómo se decide en la empresa? Sea como sea, casi siempre, la clave es: ¡¡rápido!! ¿No debiera serlo? Bueno, hasta puedo darte la razón, pero mientras desaceleramos el mundo, no queda sino decidir y hacerlo rápido. La parálisis que deviene de los profundos análisis es enfermedad habitual en muchos negocios clásicos. El vértigo de decidir afecta a mucha gente. Sobre todo cuando el error es, como todo el mundo sabe, fuente de aprendizaje caminar hacia el descrédito.

Así que los «sistemas» caminan por el lado de la teoría. Sirven para escribir libros y para mostrar la «lógica». Muestran sesudas metodologías que incorporan las más modernas técnicas. En buena parte se apoyan en consultoría de la cara, me temo. Gran parte del discurso va pegado a las prestaciones de ERPs y de paquetes informáticos que refutan en la práctica la economía de la gratuidad. Las cosas como son. Hablamos de estrategia, de competitividad de alto standing, de business intelligence, que mola más.

¿Quién no necesita información para decidir? Materia prima de la eficiencia moderna, la información es poder. Incluso hay quien osa decir que la información compartida es poder. Información, infoxicación, polución informativa: sociedad del exceso. Y en ese escenario, la norma del aeroplano no hace sino incrementar su vigencia (ver pág.7 de este pdf, con un texto de Alfons Cornella allá por 2002 en Papeles de Infonomía… qué tiempos). Vale, vale, ante toneladas de información que olvidaron los principios del just in time, ¿qué hacer? Pues afirmar ufano que decides con información y en la práctica tirar de la intuición.

Porque basar en la lógica de la argumentación perfecta la mayor parte de las decisiones empresariales es ponerse una venda en los ojos. Se sigue decidiendo mediante un complicado cóctel que incluye poder, estatus, miedo y dinero… además de información. Quizá al final todos los soportes del sistema son aprendizaje para usar mejor la intuición. Quizá ponerse manos a la obra para organizar mejor la información -aunque luego se quede en agua de borrajas- es síntoma de que luego decidiremos mejor.

Pero siendo sincero, a día de hoy, gran parte de la llamada inteligencia competitiva es de salón. Como aquellos viejos comedores que en las casas humildes no se usaban aunque se hubiera colocado allí buena parte del presupuesto familiar. No era aquello una estancia para la vida corriente. Eso pasaba en la cocina. Claro que esto lo puedo contar porque soy un carcamal.

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La imagen en Flickr es de hitzak_soberan.

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7 comentarios

sergi 28/06/2010 - 07:24

Hola, ya veo que empiezas la semana fuerte! 😉
Aqui en Mexico es domingo en la noche, pero es igual, ya estamos con ganas de empezar la semana fuertes 😛

Yo diria mas aun: no solamente no se valora lo suficiente a la informacion en la toma de decisiones de empresa, sino que se no se valora lo suficiente a los expertos en informacion (los informaticos…). Y lo digo por experiencia propia.

Tal vez si no sois informaticos nunca os fijasteis en lo que dire ahora, pero fijaros a partir de ahora: en TV, tanto en series policiacas como en peliculas, SIEMPRE los informaticos son unos pringados, que o son frikies o tontolabas, o locos, o tios sin novia…. en fin, una imagen totalmente CARICATURESCA de lo que es esta seria profesion y las horas de dedicacion y formacion que precisa, asi como tener una «cabeza bien amueblada». Ya esta bien de ser insultados de esta forma continuamente. Luego claro, como van a considerarnos seriamente en la toma de decisiones de las empresas?

Los informaticos no podemos tener nociones de marketing, de estrategia, etc… pero todos los demas saben de software, sistemas de informacion, etc… que risa! cuanta capacidad de autoenganyo…

Ni que decir tiene que este desprestigio generalizado de la profesion se traduce normalmente en sueldos mediocres para el nivel de nuestra responsabilidad y formacion, ademas de sentir que la empresa funcionaria mucho mejor si se nos escuchara.

No se si algun otro lector informatico pueda confirmar esta misma impresion. Hace a;os que trabajo por mi cuenta, pero noto este menosprecio por los informaticos incluso en los propios clientes a los cuales les sostengo su infraestructura web…. TODOS saben de dise;o y todos saben de redes sociales y de buscadores, y de todo…. me meo.

Un saludote!
SERGI

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Jesús Fernández 28/06/2010 - 09:42

Papeles de infonomia de 2002… «qué tiempos»… ¡y cuánto tiempo!

Me ha resultado muy curioso ver cómo el tiempo pasa más deprisa de lo que nos parece. Allí hay personas que yo he conocido muy posteriormente haciendo otras cosas… pero reflexionando sobre lo mismo.

Tal vez seguimos sin innovar demasiado que no sea innovación tecnológica, ¿no?

Me toca promover un «sistema de inteligencia competitiva», así que espero no perder la frescura de este post, la norma del aeroplano… y el papel de la intuición cuando nos pongamos manos a la obra.

Me ha gustado mucho este artículo. Yo también he tenido una casa con salón comedor y una vida en la cocina. Cuestión de edades, me temo… 😉

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Amalio A. Rey 28/06/2010 - 14:54

Muy buen post, Julen. Has expresado perfectamente, y mucho mejor, lo que pienso yo de los sofisticados «sistemas de vigilancia competitiva». Demasiada teoría impracticable alrededor de eso, que no cuadra con la realidad, ni con el modo en que se toman las decisiones en las empresas.
Yo apuesto por la «intuición informada»:
1) Busca toda la información que puedas antes de tomar una decisión,
2) Reconoce que la realidad es compleja e incierta, así que es mejor información oportuna que información perfecta,
3) Confío mucho más en la información recogida «a pie de calle», de fuentes primarias, hablando con los clientes, que de esos datos que se publican por ahí cuya elaboración es tan dudosa como la de las salsas en los baretos de carretera,
4) La clave está en saber elegir «prioridades informativas» y centrarse en ellas (es la parte «estrategica» de la historia, para evitar la dichosa infoxicación),
5) Una vez que has hecho los deberes (sobre todo el 1), confía en la intuición, que ahora sí que es «informada». Por cierto, a la intuición hay que entrenarla también…
Algunos abusan de la «intuición» por pereza de hacer los deberes mínimos para informarse. Y en el otro extremo tenemos a los que coleccionan cientos de datos para generar sensación de control, pero usando premisas o métodos que no permiten tomar decisiones oportunas.
El simil de los viejos comedores de las casas humildes te ha quedao bordado. Enhorabuena…

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lara 28/06/2010 - 15:30

Muy interesante y muy peligroso. Estas diciendo que se puede hacer inteligencia sin tener que gastar ingentes cantidades???? Que me dices!!!! ;·)

Enhorabuena, realmente un post para guardar

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sergi 28/06/2010 - 19:59

Excelente comentario Amalio! Es lo que yo queria decir pero 100 veces mejor dicho. De hecho, supongo que contando con tu permiso, he escrito un pequeño articulo en mi página, citando los puntos que tan bien has enumerado respecto a la recogida de información y el uso de la intuición, o «intuición informada» 🙂

http://imasdeweb.com/index.php?pag=no-infoxicarse

Saludos!
SERGI

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Julen 03/07/2010 - 08:04

@Sergi, el «menosprecio» por los informáticos me parece un complejo magma donde confluyen muchas variables. Algún día tenemos que escribir de eso. Porque es cierto que su papel es muy complejo, importante pero a veces también «demoniaco». Algún día me explicaré mejor.

@Jesús, esto de ser personas mayores es lo que tiene jejejeje. Hemos conocido comedores intocables y ¡los papeles de infonomía! 😉 Bueno, me alegro de que te haya gustado el artículo. Entre tanta diarrea mental, la estadística juega a mi favor 🙂

@Amalio, bonito concepto el de la «intuición informada». En su día asistí a una conferencia de José Enebral en la que también manejaba mucho un concepto enriquecido de «intuición». A ver si la retomo porque es tema interesante.

@lara, que sí, que sí, que las grandes parafernalias en estas cosas no aseguran, ni con mucho, que luego se despliegue información y sirva para tomar decisiones. Pero… ¡es usted libre para gastar en consultoría! jajajaja

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Consultoría artesana en red » Inteligencia competitiva 2.0 a pie de calle, reloaded 27/11/2011 - 08:56

[…] comentábamos hace unos días, ya hemos reelaborado el material de soporte para el curso de Inteligencia competitiva 2.0 a pie de […]

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