Alhóndiga de Bilbao, diez años no es nada

by Julen

Cuentan los ancianos del lugar que el inicio oficial de la obra actual fue en el año 2000. Hoy es 12 de mayo de 2010. Así que parece que han pasado 10 años. Es tiempo, ¿verdad? Uno puede repasar lo que ha hecho en 10 años le y sale una larga lista de susedidos. Bueno, malo y regular. De todo hay. En la Alhóndiga de Bilbao, según parece, han sido tiempos de una obra. Una obra de 10 años de nada.

Claro que este inmenso edificio junto al que vivo no está operativo desde tiempos inmemoriales. Yo llegué al barrio allá a finales de los 80 del siglo pasado y sólo lo he conocido como un aparcamiento provisional y como cobijo de cuatro festejos del horror. Sus tropocientos metros cuadrados en el centro de Bilbao se han muerto de risa. Hasta que alguien de por aquí dijo que con 45 millones de euros se le iba a dar la vuelta y convertirlo en otro proyecto emblemático del nuevo Bilbao. Bueno, luego luego con una pequeña desviación de 30 milloncitos más que parece que han hecho falta. Calderilla.

Pero no cantemos victoria. Aquí al lado hay una obra caótica. Al menos a los ojos de un profano. Semeja un inmenso camarote de los Hermanos Marx que entremezcla hordas de hombrones cada cual haciendo algo sin aparente sentido de conjunto. Supongo que surgirá algún orden emergiendo de este caos. Hay un edificio y unas obras a su alrededor. No preguntes por el sentido del trabajo a una persona individual. Cada cual sale adelante con un fragmento del conjunto que no tiene por qué tener sentido alguno. Ayer vi a un trabajador sentado en el suelo rompiendo con mimo una baldosa. Lo hacía con paciencia, él solo, como ajeno al enorme mastodonte.

Porque se han colocado baldosas en el suelo y se han vuelto a romper, se ha rehecho lo que se hizo y no debía haberse hecho. Hacer y hacer, frenesí de una obra que podría resultar divertida si no fuera que lleva 10 años aquí al lado. Sí, ya sé que el tango me lleva a los veinte años y me dice que no son nada. No hay de qué quejarse; aquí sólo han pasado 10.

Alguien me dijo que se inaugura un día de estos. Será estupendo para el barrio. Le dará vida. Arquitecto de postín por medio, faltaría más, tendremos un edificio moderno. Ya lleva vendiéndose a sí mismo hace tiempo: hay visitas a la obra para abrir la boca maravillados ante semejante construcción faraónica. Comunicación al poder, redes sociales en Internet incluidas. La vecindad necesita los argumentos de los tiempos modernos: ocio, cultura, vida sana. Nada de vinos malolientes. Hoy la Alhóndiga es la nueva obra faraónica del Bilbao moderno y que dice adiós a una etapa industrial de la que huye despavorido.

Alrededor de la Alhóndiga las obras surcan frenéticas las aceras. Últimamente hasta los fines de semana. Locura colectiva. Porque 10 años no es nada, qué febril actividad en los dos meses finales. Qué algarabía, qué sensación de obra desastrosa, de guadiana que ha ido apareciendo a ritmo de mambo hasta que en este tramo final culmina en una especie de manicomio colectivo.

Han sido 10 años de obra aquí al lado. Vamos a echarla de menos. Aunque todavía siempre estamos a tiempo de que la locura final de obra deje paso a retrabajos constantes que ocupen otra década. Tiempo al tiempo. Que 10 años no es nada.

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La foto en Flickr es de inthesitymad.

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4 comentarios

Arantza 12/05/2010 - 09:23

Que bueno Julen.. para los que somos de Bilbao esta obra ha sido faraónica…. tanto que ya nos parece que no se iba a hacer nada.. de los años que llevamos esperando a que finalmente se hiciera algo…Un proyecto, luego otro, luego otro distinto.. hasta que ha llegado éste. Yo visité las obras hace unas semanas y bueno, para gustos, aunque si es cierto que a esa parte de Bilbao le hacía falta el servicio de ocio y cultura municipal, que no tenía…

a ver si por lo menos, se disfruta después de tanta obra!!! Al menos así lo hemos vivido los que pasamos «la obra del metro» que es lo único que nos ha hecho «olvidar» todo el tiempo de la obra…

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Julen 14/05/2010 - 10:12

@Arantza, mientras te escribo esto oigo aquí abajo una máquina taladrando algo. ¿A estas alturas, hoy 14 de mayo no sería ya fecha para «construir» y no para «destruir»? Diossss qué follón de obra.

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El Agorante Aberrante 18/05/2010 - 15:42

Yo cuando trabajaba en este proyecto en la primera fase de comunicación decía aquello de – Conocerlo es enamorarte de él-. Igual cuando lo conozcas …

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Mikeldi Donibane 16/07/2010 - 14:06

Sinceramente creo que era algo que Bilbao necesitaba, yo ya soy asiduo de la piscina 😉

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