Sobre la prohibición de uso de redes sociales en la empresa

by Julen

Va a ser una buena piedra de toque para probar si algo está cambiando o si seguimos con los viejos paradigmas. Si el conocimiento se concibe como punto de partida para la competitividad, no cabe sino generar contextos intensivos en comunicación. Y eso pasa por aceptar el uso de las redes sociales en Internet, si no potenciarlo.

Cada vez que escuchemos que se establecen restricciones al uso de las redes sociales en la empresa, estamos generando mal clima de trabajo. Dicho de otra manera, estamos limitando la expresión de la persona como tal, estamos concibiendo a la persona en su rol exclusivo de trabajo y no como tal persona. La cosa no es broma porque cuando luego vamos a pedir compromiso y rendimiento, la moneda de cambio será la falta de involucración.

¿Se escapa la productividad por los agujeros de Facebook? Por supuesto que se escapa. Ha sido así, es y seguirá siendo. La productividad se escapará por las rendijas de la comunicación entre personas porque no habrá forma de retenerla. Las mediciones clásicas referidas a lo que sucede entre las cuatro paredes de nuestras empresas cada vez son más complejas. En un mundo donde es tan fácil establecer comunicación con el exterior, se complica todo lo que se refiera a aislar variables «dentro» de la organización.

El tan referido informe Whistle – But Don’t Tweet – While You Work, de Robert Half Technology venía a decir que un 54% de empresas americanas prohibían totalmente Facebook, MySpace y Twitter.La muestra era de unas 1.400 empresas de más de 100 empleados y se preguntaba a los responsables de Sistemas de Información. Eso era en octubre de 2009. ¿Cómo creéis que evolucionan los datos? ¿A peor?, ¿a mejor? Lo cierto es que escucho a muchas empresas quejarse de ello.

“Using social networking sites may divert employees’ attention away from more pressing priorities, so it’s understandable that some companies limit access,” said Dave Willmer, executive director of Robert Half Technology. “For some professions, however, these sites can be leveraged as effective business tools, which may be why about one in five companies allows their use for work-related purposes.”

¿Tiene sentido pensar que existen empresas de dos tipos? ¿Las que requieren que sus personas se conecten y las que no? Otra vez nos descubrimos pensando en la gente como simples medios para un fin. Mal camino.

Otra cuestión igualmente delicada es la forma en que abordar quién eres en las redes sociales. Me refiero a tu rol como profesional y a tu vida personal. Vida profesional, vida personal: escenarios donde se entremezclan las tramas. Separar puede resultar difícil. Pero también ¿peligroso? La vida profesional, en ocasiones, actúa de acuerdo con la teoría de los gases y se expande para ocuparlo todo. ¿Hay que defenderse contra esa invasión?

Por otro lado, cabe la posibilidad de generar códigos éticos sobre el uso de redes sociales en el ámbito profesional. Rosaura Ochoa recapitulaba algunas de estas recomendaciones en su artículo El uso de redes sociales en el lugar de trabajo. Cuando las repasas no son sino una serie de normas cívicas básicas y lógicas. Vamos, nada que el sentido común no debiera reconocer. Pero, en fin, son una alternativa para «prevenir» males mayores.

El uso de las redes sociales generalistas tipo Facebook no hace sino abrir más la empresa, que no puede «controlar» una conversación que diluye los límites dentro/fuera de su organización. Si pudiéramos captar una instantánea de las conversaciones que se están produciendo en una empresa en un momento dado, ¿cuántas de ellas serían sólo entre personas del interior de la organización? Esos límites artificiales se desmoronan porque los costes de la conversación con el exterior son a veces menores que los de la conversación interior.

Fuera está la autorregulación sobre la base de quién soy y qué hacen los demás. Dentro percibo una regulación que terceras partes han dispuesto y que compite con esta otra autorregulación. Dentro, me temo, hay menos libertad.

Ah, y todo esto no obvia, por supuesto, para reivindicar el silencio. Otro día escribimos de ello.

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La foto en Flickr es de germeister.

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8 comentarios

Mikel Iridoi "himikel" 19/01/2010 - 12:27

Es difícil que encajen las redes sociales en empresas tradicionales, por sus distintas naturalezas, la empresa tiene una estructura jerárquica y el individuo única, y es mucho más natural relacionar únicos que jerarquías, y cuando se relacionan empresas se hacen entre cúspides, pero el uso de la red social en toda la empresa es de alguna manera dar voz a la base de dicha jerarquía, y esto da mucho miedo a empresas tradicionales, acostumbradas a controlar/explotar en vez de a colaborar/desarrollar, tanto en las personas-profesionales como en el equipo-empresa.

Ayer mismo charlaba con Aitor Bediaga «abediaga» sobre las dificultades con las que me encuentro para vivir como profesional 2.0…, y es que creo que para que las empresas se abran, también hay que abrir el mercado, de esta forma tendremos cabida nuevos profesionales donde las redes sociales sean nuestras herramientas de trabajo.

Al que le interese, ayer publiqué un post relacionado: ¿Preparado para ser Persona 2.0?
Julen gracias por el post, estamos «en onda» 😉

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Jaume Armengol 19/01/2010 - 12:57

Desde mi punto de vista, la regulación (mejor autoregulación claro) en las empresas es imprescindible en este tema, pues:

– Atención a la productividad : creo que son herramientas que restan productividad en entornos orientados a tiempo sentado en una silla, en otros orientados a responsabilidades, tareas medibles, etc. son valor añadido a la organización a bajo coste (además de que favorecen la retroalimentación y una mayor integración de las personas).

– Comunicación informal de la empresa : ofrecer aspectos clave de esa comunicación a los empleados para que los tengan en consideración cuando mencionen a la organización (honestos, pero también fieles).

– Fugas de información: vale, somos abiertos, dospuntoceristas, pero tenemos competencia lista y ávida de nuestra información… controlar cómo ésta se difunde y cuál nos interesa reservarnos. Establecer criterios binarios a los miembros de la organización para que intuitivamente sepan gestionar ese riesgo.

El cómo abordarlo no es trivial, ya que requiere de un nivel de madurez al respecto que yo diría aún no se ha alcanzado del todo.

Gracias por el post, Jaume.
http://www.solucioncrisis.com

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Esteban 19/01/2010 - 18:47

Julen, me gustan mucho tus escapatorias. Un saludo

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M@k, el Buscaimposibles 19/01/2010 - 22:37

OFF TOPIC: Lo siento, será muy chachi, a otros puede que les eleve la moral, pero esto de que los tuits aparezcan como comentarios no me mola: me frustra buscar comentarios al post y no encontrar nada, Julen. Además, ¿no iría contra atura esto de concentrar la conversación distribuida en un sitio,aunque sea sólo para visualizarla? 😛

Al grano.

[empresario]La empresa que he creado es para ganar dinero.Te doy condiciones dignas de trabajo o incluso un sueldo digno y acorde a tus tareas.Si dejo de ganar pasta porque tú tardas más en hacer tus tareas por redsocializar, tenemos un problema.[/empresario]. Siendo optimistas.

[trabajador]No, no quiero que la empresa me use como «persona».El tiempo que paso en ella es sólo para trabajar,mi vida real comienza después.Si estoy muy viciado y mi vida real se ha virtualizado,lo mismo redsocializo,pero si no, me importa bien poco que me dejen o no usar FB[/trabajador].Siendo optimistas y pensando que no es fumador.

Lo siento, pero yo lo veo así: precisamente porque nuestra vida se ha extendido en general gracias a las redes sociales, la empresa, que es un medio (espartano,feo,desagradable y todo lo que quieras) donde se socializar, es menos importante para las personas.Por ejemplo: ¿tiene igual calidad la redsocialización que puedas hacer a toda prisa, a escondidas, etc. desde tu curro que tranquilamente en casa o tomando un café?

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M@k, el Buscaimposibles 19/01/2010 - 22:45

Vaaale,ya me he dado cuenta de que los tuits van después de los comentarios.Me autofustigo un rato luego. Pero otra cosa: ¿quién te dice que la empresa quiera conversar con el mundo?¿Cuántos lectores crees que han tenido los autores que tú lees?Si hasta todo eso se está poniendo en duda,¿no?Que no, que todo esto de las empresas mejor para unas que empiecen de cero, y según en qué sector… (Y esto creo que lo dije en Cáceres, hace…).

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Julen 25/01/2010 - 10:33

@Mikel, muy interesante lo que has escrito sobre persona 2.0.

@Jaume, estoy contigo. Creo que hay ciertas normas (sentido común escrito) que merece la pena explicitar. Eso sí, también pudiera ser que sólo se actuara por excepción. Es decir, que sólo cuando hay movida se regula. O sea, cuando ha fracasado el laissez-faire.

@Esteban, gracias.

@Mak, conste que yo también creo que es mucho mejor centrar los esfuerzos en las nuevas empresas (o lo que sean) que no en cambiar las viajes estructuras. Sin embargo, siempre te queda el regusto de que allá, en esas empresas que ya existen, es donde está el 99% de la gente.

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Consultoría artesana en red » La web social evidencia la (falta de) confianza 27/11/2011 - 09:13

[…] son su territorio. Aunque en sus prácticas internas haya un buen puñado de organizaciones que prohíben el uso de las redes sociales en Internet, resulta que son ellas mismas las que han puesto su chiringuito -su página en Facebook- también […]

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Mariano Jofre 18/10/2013 - 16:40

Está demostrado que una persona puede mantener su nivel de atención y foco por una hora y media o dos horas como máximo. Luego necesariamente necesita tomarse un descanso de 15 minutos por ejemplo.

Las empresas deberían poder entender esto para que sus trabajadores puedan mantener la energía constante a lo largo de la jornada laboral y en ese sentido los descansos deberían ser moneda corriente.

Luego estaría en cada trabajador qué hacer con su tiempo de descanso. Si chequear su Facebook o salir afuera de la oficina a caminar un rato, comprarse un café, etc…

En lo personal considero que las redes sociales deberían estar permitidas en principio, luego establecer algunas normas y por supuesto generar un ambiente laboral basado en la confianza.
Es importante que el trabajador no pierda productividad en su trabajo y asuma sus responsabilidades, pero que cuente con una vía de descanso o dispersión mental en otros lugares.

Finalmente aprovecho para compartir un artículo que escribimos sobre este tema y que podría ser complementario a este post…
http://www.glidea.com.ar/blog/las-redes-sociales-en-la-empresa

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