En la era del acceso y en la del exceso, que lo mismo da que da lo mismo, parece que no venden ni la mesura ni la contención. En negocios anclados en la web social no hay alternativa. El señor Tim O’Reilly ya lo santificó en su día. ¿Que es la web social? Un conjunto de «aplicaciones que mejoran cuanta más gente las usa». O sea, que más madera. ¿Acaso pensabas otra cosa? Ah, por cierto, te recomiendo que eches un vistazo a las presentaciones de Txipi en slideshare sobre web social o la que, por ejemplo, tenemos subida en Aprendices, formato odp.
Pues sí. Hay otros caminos. Dicen que en un mundo de borregos hay mil formas de pacer. No quiero pensar que la web social está llena de borregos (nos repartiremos según campana de Gauss) , pero sí que creo que la inflación de voceros es evidente. Y a lo mejor tengo que empezar a decir eso de ¡Yo el primero! Bueno, aunque quizá no se note; procuro comedirme y no gritar demasiado.
Pero, ¿tiene sentido callarse y ser comedido en una estrategia de presencia en la web social? Yo creo que sí. Vale que ser fácil de encontrar es bueno para cualquier negocio, pero ser muy facilón le quita atractivo a cualquier cosa, ¿no? Creo que hay demasiada obsesión por «conquistar» cuotas de lo que sea: de pantalla, de mercado, de followers, de suscritpores, de visitas. Cantidad, cantidad. Los números nos tienen que avalar. Éxito porque las hordas que nos siguen hacen mucho bulto.
Pero cuando piensas en los nichos y en una estrategia de presencia en algún hueco de la larga cola, entonces la lógica de la cantidad se relativiza. ¿Quieres millones de clientes? Pues pégate con el mundo, asume las reglas de juego de la guerra comercial y carga tu artillería. Apréndete todas las listas de consejos y no te saltes ni uno. Es una opción.
Pero hay otras opciones, que pasan por líneas de trabajo mucho más gratificantes y orientadas a servicios especializados. Son huecos más pequeños. Pero cada vez hay más huecos para rellenar. Incluso son huecos que se autogeneran. Surgen como reacción natural en un mundo postmoderno con gran peso de la individualidad. ¿Realmente necesitas tanto esfuerzo en la difusión?, ¿grandes actividades de comunicación en la web social donde todos parecen competir por lo mismo?
Así que dejo aquí algunos hilos para posteriores conversaciones:
- ¿Dónde están y quiénes son esas personas que comparten un interés muy específico?, ¿encuentras algún nicho con el que te identificas?, ¿alguna causa concreta que da cierto sentido a lo que eres y orienta lo que haces?
- ¿Cómo se comunican esas personas?, ¿qué tipo de relación mantienen entre ellas?, ¿quiénes son las personas que tienen ascendiente sobre las demás?
- Si vieras tu mercado como la suma de pequeñas especificidades, ¿cuáles de esas especificidades son más relevantes para ti?, ¿podrías pensar en una empresa más pequeña y más especializada?, ¿más competitiva y más satisfactoria para quienes trabajáis en ella?
Dicho lo anterior, ¿cuál debería ser la estrategia de presencia en la web social de una empresa orientada a uno o varios nichos? Sea la que sea, no tiene por que ir de la mano de la desmesura y la invasión.
Algunas otras entradas en este mismo blog relacionadas con este tipo de asuntos:
- Marketing (inexistente) de la consultoría artesana
- Unmarketing
- Me quedo al fondo, en la larga cola
- La teoría de la larga cola en la empresa industrial
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La foto en Flickr es de alamez.
5 comentarios
Buena y necesaria reflexión. Personalmente, me gusta más lo que encuentro por causalidad que lo que me busca desesperadamente… Puede que sea porque cada día es más difícil que algo nos sorprenda.
¡Buenos días!
Pues para el social media esti va de conversaciones entre personas y cuando es que está al otro lado es una empresa canta, no deja de sonar a robot telefónico. Un jefe de marketing o un becario que lleve una cuenta de FBK o lo que sea de la empresa reportará cuantos amigos o fans colecciona y cunato han aumentado no lo que han aprendido de la experiencia.
Imagino que no será lo mismo si todos los trabajadores de la empresa son los que tienen conversaciones públicas con los clientes o entre ellos. Seguro que como con los países la calidad de una empresa será la calidad de sus conversaciones.
Me ha gustado el post Julen, creo que tienes razón 😉 el ruido es muy grande y lo hacemos entre todos/as. A veces merece la pena pararse a escuchar, con calma y leer post como este. Gracias.
Hola Julen
ya conoces mi opinion al respecto acerca del vociferio y griterio que se esta montando en dar importancia a partes del todo en las señales empresariales que se deberia dar por hecho que cumplen en su comedida funcion, pero parece ser que estamos ante una horda de optometristas sociales cuya pretension es aumentar las dioptrias a los que ven perfectamente(menuda paradoja).
La relativizacion, el sentido comun, la responsabilidad y los conocimientos seran las que marquen los tempos sociales, no los evangelistas.
Las empresas solo han de perseguir un objetivo, satisfacer a sus clientes, y si es posible ganar dinero, el resto no me sirve.
un cordial saludo desde la costa brava.
[…] el objetivo no es la cantidad, el uso de la web social es mucho menos estresante. No hay que ir a por todas. No es una cuestión de llegar a los 800.000 fans y a los 2.000.000 de […]