Marketing (inexistente) de la consultoría artesana

by Julen

artesano-pequeVender, venderse, estamos para ganar dinero, hay que ser competitivos, tenemos que comunicar lo que hacemos, publicidad y promoción, las no sé cuántas P del marketing, tensión en el mercado, buenas ofertas, gestión de la satisfacción de nuestros clientes, medición, medición, medición, agasajar y cultivar relaciones. Bla, bla, bla, bla.

Pues va a ser que no, que no podemos trabajar de la forma en que los  libros de marketing dicen que tenemos que hacerlo. Porque el 99,9% de esos libros no conciben nuestro modelo de consultoría. Asumen un mercado en el que competir significa que debes ganar mientras el vecino muerde el polvo. Esto es una guerra y hay que sobrevivir. Así que ármate de de tarjetas (yo no las uso), apunta bien hacia el centro de la diana y sé un sabueso capaz de apretar bien a la presa hasta que sea tuya. Y si consigues cliente fiel y cautivo, mejor. Pues va a ser que no.

Reconozco, por supuesto, hay una línea muy sútil que separa la simple comunicación de la venta. No debemos vender, sino hacer. No en los términos clásicos. Ante la duda mi modelo pasa por no presionar. No tengo plan comercial ni invierto en publicidad ni estoy pensando en cómo hacer para que me conozca el mundo mundial. ¿Por qué? Porque ni me lo pide el cuerpo ni sería «competitivo». Sin embargo, esto no obvia para que sea fundamental contar lo que haces y lo que piensas. Pero olvida la cantinela comercial.

Cuidado con este enfoque. En muchos sitios no funcionará. Son importantes las pautas culturales: ¿cómo es el mercado en el que te mueves? A veces pienso que si trabajara en Madrid o Barcelona el enfoque debería ser diferente, pero lo desconozco; no sé cómo será allá. La globalización fracasa de vez en cuando: no consigue -menos mal- homogeneizar la actividad artesanal. Los miles de microsegmentos que hemos creado son, hasta cierto punto, territorio inhóspito para la globalización. Aunque, por supuesto, hay normas de mercado que son comunes. No habitamos los mundos de Yupi.

Difícil será ver un catálogo de producto de un artesano, difícil ver publicidad, difícil una actitud comercial agresiva. Nos movemos en la paradoja de la marca personal y en una extraña soledad compartida. Tenemos otras maneras, basadas en la lógica de territorios más pequeños. En un pueblo nos conocemos todos: la consultoría artesana crea barrios. De acuerdo que con mayor movilidad que los que requieren ladrillo; pero son barrios. Y allí nos conocemos casi todos. La transparencia no tiene que ver con Internet, sino con la actividad del día a día (también en Internet, claro).

Suena raro, pero nuestra inversión en marketing clásico debería tender a cero.

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32 comentarios

Kuikailer 02/09/2009 - 07:23

Interesante reflexión. Tengo muchas preguntas pero hay una en especial. ¿cómo ves la internacionalización del producto? Evidentemente el transporte puede ser un agravante pero mediante internet reduces en intermediarios… O no lo ves así?

Gracias 😉

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mkl 02/09/2009 - 07:23

Recuerdo que, ya hace un montón de años, en mi consultoría anterior (una cooperativa), se planteaba cada dos por tres, la necesidad de la función comercial. Inclusó se hablaba de contratar comerciales. Siempre estuve en contra, como lo estuve de catálogos y folletos. Mi tesis es que debíamos ir a ver al cliente con las manos en los bolsillos, sin más instrumento que nuestra capacidad de escuchar y, claro, de preguntar, de conocer, en definitiva, a través de la conversación. Ante algunos proyectos en los que competíamos con las grandes, veías como se presentaba, antes que tú, un grupo de señores y señoras uniformados, con un montón de papeles (catálogos, métodos, pouerpoins, herramientas). A veces hasta llevaban su propio proyector de transparencias. De alguna manera, cuando te presentabas tú, sólo y sin parafernalia, sabías que ya habías empezado a generar confianza.

¿Sabes como sabes si has entrado en una buena coctelería? Cuando no tienen carta de cócteles, cuando el barman te escucha y decide cuál es la combinación que te puede ir mejor en ese momento, con ese estado de ánimo concreto…

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Kuikailer 02/09/2009 - 07:26

Vale, vale que @yoriento me ha puesto al día con http://bit.ly/A4WAs

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Julen 02/09/2009 - 07:48

@Kuikailer, de todas formas, lo de la «internacionalización» no sé cómo me afecta en tanto que consultor artesano. No sé si es relevante, de verdad.
@mkl, me lo has puesto en bandeja: ¡hay que ver lo que hacéis los alcohólicos para que alguien os escuche! 🙂 🙂 🙂 🙂

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Yoriento 02/09/2009 - 08:30

Aparte las cuestiones éticas del marketing cutre-consultoril y el estilo propio de la consultoría artesana, la venta sin vender, basada en las relaciones personales de «manos en los bolsillos» y no de pouerpoin, sólo se la pueden permitir los que ya tienen los contactos previos relativamente afianzados y/o no sufren problemas de tesorería para esperar que caigan los primeros clientes.

Yo he sido en mis funciones en la Junta de Andalucía receptor de consultores enchaquetados y las cosas estaban muy polarizadas: por un lado estaban los que ya contaban con los apoyos necesarios y sabían que algo les caería, y estaban los que debían enfolletar al cliente, en este caso yo como mero intermediario-informador sin mucha influencia. Y nos es que la papelería influyera en sentido positivo, sino en el negativo: si no la tienes parece que no tienes potencia suficiente ni para invertir en publicidad. Ya me entendéis como funcionan ciertas cosas.

El asunto es complejo, pero si como consultor quieres salirte de los raíles de la marca personal artificiosa necesitas previamente poder ofrecer referencias muy concretas y tener mucha paciencia.

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Julen 02/09/2009 - 08:37

@Yoriento, puede que entremos en territorio delicado: el poso que hace falta para llegar a la competencia en la artesanía. Me refiero a años de experiencia, algo que parece haber perdido valor en nuestra sociedad donde la carnaza de 30 años se compra mejor. No sé si has leído La corrosión del carácter de Sennet, pero es uno de los temas que deberemos abordar.

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Juanjo Brizuela 02/09/2009 - 08:39

Si entendemos el marketing de forma tradicional, la verdad es que tiene muy poco encaje en el modelo de consultoría artesana, sin duda. No casa. No nos lo creeríamos.

Pero sí que creo que hay MUCHA comunicación. Y la comunicación no es más que contar lo que haces e incluso, contar lo que piensas. Sin aspavientos sin forzar. Simple. Otra cosa es qué importancia le damos al factor «persuasión» y al aspecto formal, que sin duda ayuda a tener una comunicación de un mayor impacto (que no mayor venta…).

La transparencia y la coherencia han sido siempre valores fundamentales en la relación entre lo que el proyecto es y lo que el proyecto hace. Y en esa línea es donde entiendo que se ha de jugar.

Me sorprende el matiz que proponeis @julen y @yoriento respecto a la marca personal, cuando me da la sensación (por lo que veo y leo) que un consultor artesano va construyendo (no sé si con intención o sin ella) una marca, una referencia, una percepción acerca de su trabajo y de sus pensamientos.

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Amalio A. Rey 02/09/2009 - 09:06

Volvemos a estar de acuerdo. En mi empresa (pretendidamente) artesana no hacemos nada de marketing industrial del tipo que estas contando en el post. Al principio sí, pero pronto nos dimos cuenta que no pegaba con nuestra filosofía, con lo que hacíamos, ni con las pautas culturales del tipo de clientes que nos gustaría acompañar.
Tengo claro que es una cuestión de HACER bien las cosas pero tambien de CONTAR lo que hacemos. En esta segunda parte está, OJO seamos honestos, lo que podría llamarse «marketing 2.0» o «marketing para artesanos», o si prefieres utilizar eufemismos (aunque sea solo por eso de que las palabras no son inocentes), puedes llamarlo «comunicacion»… pero está claro que, para la mayoría de los mortales que todavia no tienen «marca comercial» (un activo más que imprescindible tambien en el mundo 2.0 si eres un profesional que vive de lo que hace), hay que dedicar tiempo, más del que nos gustaría, para «comunicar», explicar, difundir…. y ese discurso, lo quieras reconocer o no, tendrá también mensajes-de-venta…. pero coincido que no es lo mismo «vender-motos» o «hablar-solo-para-vender», que «contar-lo-que-realmente-haces-con-ilusión-y-de-paso-que-te-sirva-para-persuadir-a-otros-a-que-hagan-un-proyecto-contigo».
Si te sobran proyectos (como es probablemente tu caso) solo te importará «hablar con ilusión» pero si te faltan y tienes que pagar a tu gente, lo segundo empezará a pesar más en el espíritu de tu comunicación.
Julen, ya que hablamos de transparencia, me preocupa y molesta mucho el uso y abuso de los eufemismos en el mundo 2.0, para envolver de un halo de inocencia y neutralidad palabras como el marketing y muchas otras. No digo que sea tu caso, pero más de uno dice una cosa y hace otra.
Por otra parte, «la-necesidad-de-comunicar» o de hacer-algo-más-que-«hacer» para conseguir-proyectos (vaya, eufemismo de «facturar») dependerá, como ya sabes de muchos factores, y en especial de: 1) Si ya tienes marca y un grupo de potenciales clientes (es decir, gente que puede pagar) que confía en tí y sabe cómo «haces», 2) Si tienes o no nominas para pagar o costes de estructura que generen «estres de facturación», 3) Cómo vas de proyectos en relación a tus necesidades, si te sobran o faltan, 4) El tamaño y complejidad de los territorios donde te mueves, porque en los «barrios» de Bilbao, San Sebastian o Malaga es más facil «encontrarse» con potenciales cómplices del artesano que en macro-ciudades como Madrid o BCN. Me gusta porque has matizado en cierto modo esto, al decir que en algunos sitios no funcionará tu receta de marketing artesano….
Algunos de estos 4 factores dependen en gran medida de un posicionamiento, y son endógenos al consultor, se pueden gestionar. Pero otros no tanto, o al menos a mi me lo parece, y ponen ciertos grados de libertad a lo que puede hacer la empresa o el profesional.
Por terminar, lo que en mi empresa siempre decimos es: «Seremos lo que diga la experiencia de usuario de nuestros clientes, y no lo que digamos de nosotros»

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Kuikailer 02/09/2009 - 09:28

@mkl, ay! cómo me duele que hables en pasado d cooperativas, pero al paso que vamos tampoco me extraña. En cuanto a la artificialidad, completamente de acuerdo: una vez me dijo un cliente ya casi borrachete «Ahora, te sonríen aunque te cagues en su puta madre… y no insulto para hinchar mi ego, sino para ver cuanto de persona queda dentro de la chaqueta» (más o menos)

@julen, la internacionalización tiene a la consultoría lo que el sirope al helado. La cantidad de información, mejores prácticas, modos, soluciones, actitudes.. que recibes de personas o consultorías homólogas pero en otro contexto es una de las innovaciones que hará que, sin cambiar las bases de vuestro ideario, aporte ese «algo más» que no darán los que os hagan benchmarking (vamos, os copian)

No doy la mano derecha que me hace mucha falta , pero sí la izquierda a que allende hay empresas como la vuestra. Hay financiación pública para que os conozcáis y habléis.

@yoriento, aplicando un punto quisquilloso-franchutoide de vista, tanto los enchaquetad@s con apoyos como los que no, suelen ser bastante mediocres en el resultado final, creo, por falta de feedback B2B y B2C. No es que no se sepa delegar, pero ni tenerlos bajo presión-control continuo ni «quiero esto el día X y me da igual lo que salga» es bueno. He visto muy pocas garantías de satisfacción del cliente (algo leí en alguna recomendaciones tuyas tuiteras, by the way)

@juanjo dos cuestiones. La primera: la comunicación puede ser buena, mala , regular… incluso poca, pero mucha para mi significa cierto nivel de ‘infoxicación’ (como 30 tuits seguidos sobre como te haces una toritilla) Por otro lado, «consultor artesano» coincido que es una marca al definirse como opción alternativa e innovación en este sector.

@julen, Habiendo leído los valores que proponéis y tal, sinceramente, sois lo más parecido a una cooperativa de trabajo asociado: democracia en las decisiones, tomar como finalidad y principal el valor humano antes que el capital, aprovechamiento de recursos endógenos…

Se acabó el café… scheisse

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Adrián García 02/09/2009 - 09:44

Yo creo que el marketing en la Consultoría Artesana no es tan relevante pero si haces márketing cuando hablas con los clientes, cuando les invitas a comer o a un café, cuando les mandas un artículo interesante. No debemos confundir el marketing de masas con el marketing en general. Estoy de acuerdo en que no se haga marketing masivo porque no sería rentable, ni siquiera tendría sentido atacar masivamente puesto que, como Consultor Artesano, tu capacidad de mantener clientes es limitada.

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cumClavis 02/09/2009 - 11:29

Por lo que hace a Madrid y Barcelona, personalmente que trabajo en ambas, esta forma de conducirse surge tanto efecto [o más…por contraste] como en cualquier otra parte. Hace años que trabajo sin «venderle» nada a nadie. Básicamente «propongo» en base a lo que se me propone… Y que nadie se llame a engaño y crea que utilizo «eufemismos», las relaciones han de ser de confianza por ambas partes. La persona con la que colaboro ha de ser consecuente con la relación y no explotarme. También se puede pensar que esto es romántico o ideal, pues…¿que queréis que os diga? para mi es muy real, tanto como que no me puedo quejar en absoluto de los proyectos (ni por cantidad, ni por contenido) que estoy llevando entre manos.
Ah! yo si tengo tarjeta [más pequeñita de lo habitual], de autodiseño y me encanta. Es que mis apellidos [no entiendo porqué] inspiran a la fabulación y al pensamiento creativo… Magnífico el apunte!!!

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luis.tic616 02/09/2009 - 12:31

No es que no haya marketing o acción comercial. Muy al contrario, estás continuamente en proceso de vender tu trabajo, porque vendemos estrictamente por los resultados y beneficios que proporcionamos.

El cliente está atento y es listo. Si lo haces bien (resultados, forma de trabajar, confianza, …) te seguirá contratando él mismo y/o se lo dirá a sus contactos – red, red, red – y no necesariamente de otras empresas, también de otras areas de su misma empresa (me acaba de pasar ahora mismo, de finanzas he saltado a RRHH)

Evidentemente «la puerta fría», los folletos, los mailings, y demás parafernalia no son para vender consultoría artesana. Nuestros canales comerciales principales son nuestros clientes y ojo, otros canales donde puedas demostrar _directamente_ tu capacidad: seminarios, ponencias, tu blog (ay! yo no puedo esto), artículos, … por eso a veces me encabrono cuando asisto a presentaciones y veo las mismas slides, con mensajes repetidos, archisabidos, haciendo perder el tiempo … Yo he vendido más de un proyecto después de una presentación/ponencia. La gente no es tonta insisto

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Germán 02/09/2009 - 14:31

Vieja e interesante cuestión Julen.
No se como se llama pero creo que algo hacemos para vender … ¿o no marketing un blog?. Otra cosa es intentar vender todo lo que se pone a tiro, prometiendo cualquier cosa con tal de facturar.
Para mi lo importante es ser visible, dejar abierta la posibilidad a que un cliente me llame sí piensa que le puedo ayudar. No proponer nunca la ayuda, si el cliente no la solicita. Pero para que el cliente te llame es importante ser visible, realizar acciones de marketing o de lo que sea, lo de menos es el nombre.

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Enrique L. Belenguer 02/09/2009 - 16:40

El tema es que cuando hablamos de Marketing, nos estamos refiriendo a la Venta y a la Publicidad, a la Promoción como actividad que pretende pro-mover. Pero el Marketing en su propósito esencial es identificar y satisfacer las necesidades y los deseos de los stakeholders, mientras que la Venta busca convertir la mercancia ( productos o servicios) en dinero. Mientras que el Marketing busca un relación a largo plazo con sus clientes, la venta lo hace en un enfoque mas a corto. ¿Qué hay de criticable el averiguar que necesitan tus clientes , conformar una respuesta satisfactoria y llevarla a cabo? Esto no tiene nada que ver con la dimensión de la empresa, es mas cuando mas pequeña sea en mejor condiciones está para ello.No, el Marketing como tal no tiene la culpa de que existan producto y servicios fraudulentos. el Marketing y la Ética empresarial no tienen porque ser antagonistas.Otra cosa son las ganas que tiernen algunas empresas de aplicar la Ética en sus acciones
Enrique L. Belenguer
Director de Inmerco Marketing .

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Odilas 02/09/2009 - 21:24

A riesgo de hacer una aportación muy simple, yo diría que todo es cuestión de sentido común, de equilibrios y de naturalidad.
Algunos entornos monstruosos nos han enseñado a olvidarnos de lo que es natural entre personas (porque son personas siempre los sujetos de una acción/relación comercial). Creo que basta con «desaprender» algunas monstruosidades, tan patéticas que resultan obvias.

Por lo tanto creo que es más una cuestión de fomas que de métodos o modelos. Se puede entregar una tarjeta, o presentarse en una primera reunión con toda la información que un cliente necesita para valorar si eres tú con quien va a jugar…y hacerlo con exquisitez artesana ;-), con respeto por las necesidades reales del cliente y sin vampirismos (perdona Manel ;-).

Hemos visto tantas malas prácticas que confundimos a veces la práctica con lo mala y nos lo cargamos todo.

Bien, no sé si me explico, para mi, cualquier método es respetable si los fines que se persiguen son establecer relaciones sanas y naturales.

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Alberto 03/09/2009 - 00:16

Hola Julen:
Leyendo lo que escribes y escriben, te propongo que los artesanos escriban (escribamos), un e-book sobre la consultoría artesana, para fijar conceptos. Una creación colectiva con el capital humano del taller, será un ejemplar de referencia. Tanta experiencia acumulada-humanista-holística.

No vaya a ser que otros se adelanten.
Saludos,
Alberto

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Julen 03/09/2009 - 06:58

@Juanjo, es evidente que «marketing» es algo que… depende del color del cristal con que lo mires. Quienes sois profesionales de ello vivís, claro está, de algo que se consume muy bien en las empresas porque mira directamente a más y mejores negocios, a mejorar reputación e imagen, etc. Pero creo que se puede y debe introducir sentido crítico en todo esto: los desmanes de la comunicación invasiva, la obsesión por vender y captar cliente coloca a las actividades de marketing (al menos a las que quedan más cerca de la publicidad, la promoción y la posterior venta) en lugar delicado.
Respecto a la «marca personal» vivimos en una delicada paradoja. Porque nos movemos en una «cosificación» de nuestro valor. Yo no tengo nada claro que deba colocarse el sustantivo «marca» a la persona. Es aceptar que su valor lo pone el mercado y que se vive (más que se trabaja) para incrementar ese valor. Y como personas, somos mucho, mucho más.
@Amalio, cada día tengo más claro que mi «receta» sólo funciona en determinados contextos. De esto tengo que escribir porque por nada del mundo quiero parecer que soy alguien que dice cómo hay que hacer las cosas. Lo que digo es lo que creo que podemos hacer determinadas personas con ciertos perfiles profesionales y una trayectoria detrás.
@Kuikailer, no me interesa la internacionalización en sí misma. Tengo suficiente gratificación más inmediata y controlable desde ámbitos más cercanos. No quiero internacionalizarme, no le veo sentido. Lo cual no obvia para tener en cuenta este contexto.
@cumClavis, ya ves unos con tarjeta y otros sin ella. Muchas formas de actuar pero unos ciertos rasgos comunes por detrás.
@tic616, «vendemos estrictamente por los resultados y beneficios que proporcionamos»… esto es muy matizable porque esos resultados y beneficios tienen muchas diferentes percepciones. A veces en las empresas sólo parecen remitirse a los resultados económicos. Si ampliamos el concepto, de acuerdo. Y aún así, «vender» se transforma en algo bastante diferente al estándar comercial de la consultoría «tradicional» (sea esto lo que sea).
@Germán, muy de acuerdo. Para mí ese término (visible) me parece mucho más útil en nuestra forma de trabajar. Algo así como «fácil de encontrar».
@Enrique, pero estamos hablando de modelos empresariales mucho más contenidos y pequeños, donde no se aplica la idea de «stakeholder». Cada cual, cada artesano, es él y sus circunstancias y hay reglas que no aplican. No digan que apliquen en otros mercados, pero no las veo en nuestra actividad profesional. Y nada criticable en que otras empresas de mayor dimensión hagan lo que dices respecto a sus clientes. Lo que digo es que un artesano debe buscar alternativas y no seguir el patrón de modelos más maquinales.
@Odilas, está bien la apreciación sobre la importancia de los fines. La suerte que tenemos los artesanos es que nos cuesta repetir experiencia profesional. El método se regenera con la actividad y sí, claro, las prácticas son lo que cuenta. Lo que hacemos.
@Alberto, pues que se adelanten, no hay problema. No tengo ninguna prisa.

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luis.tic616 03/09/2009 - 11:37

De acuerdo pues Julen, porque siendo consciente de que la percepción de tener «resultados y beneficios» es plenamente subjetiva, me refería no sólo a los económicos, o al menos no sólo a los cuantificables directamente, aunque al final creo que es bueno, instrumentalmente al menos, el poder cuantificar – aunque sea estimando – beneficios económicos, pues deja sin armas a muchos y allana muchos caminos.

Y por supuesto, es justo lo que defiendo – ¡el «modus vendendi» 😉 es diferente!

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José Ignacio Familiar 03/09/2009 - 22:46

Hay un debate colateral a éste que enuncio como base de la argumentación pero sobre el que no quiero profundizar porque no es el tema del post ni de este comentario: hasta que punto las características que atribuyes tu y otros compañeros al que denomináis consultor artesano son en buena parte propias de cualquier buen consultor independientemente del tipo de empresa en el que trabaje. Todos los buenos consultores que he conocido, aquellos con los cuales he aprendido el oficio, los que representan mi ideal de la profesión, son consultores que encajan básicamente en los parámetros de la consultaría que denomináis artesana, porque la consultoría al final es el consultor, el cliente y las necesidades de éste. Metodologías, cuadernos de estilo, matrices varias y demás son muletillas que nunca determinan el éxito de la colaboración. Al final lo que tiene el consultor es su talento, su conocimiento y su experiencia. Nada más. En otro momento me gustaría profundizar sobre estas ideas.

Pues uno de los mejores consultores con los que he tenido y tengo el honor de trabajar, sin duda el mas anárquico, libre y personal de todos ellos, ha hecho de la elaboración de documentos ya sea promocionales, entregables o de cualquier otro tipo un arte sobre la cual cimenta su innegable éxito profesional. Su exuberante y voluminosa documentación es absolutamente artesana, personal, irrepetible y libre, ajena a las normas de cualquier cuaderno de estilo e incluso a la lógica de la profesión que recomienda concisión y concreción. Compañeros como alorza o balapiaka que han tenido la oportunidad de trabajar con él, porque es absolutamente reconocible al hilo de lo dicho, te podrán dar fe de lo que te cuento.

Lo que este compañero ha sabido hacer con éxito es potenciar al máximo sus virtudes y minimizar sus defectos para construir un estilo de consultoría absolutamente personal. Y artesano, cualquiera que sea la acepción que queramos darle a esta palabra. Porque hay tantos estilos de consultoría como personas ejercen el oficio. Por eso es imposible establecer cánones de lo que es la buena consultoría le llamemos artesana o de otra manera. Creo que te equivocas diciendo lo que se debe hacer o no, porque siempre habrá una persona que lo haga bien, de manera personal, artesana y de forma diametralmente contraria.

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Julen 04/09/2009 - 05:49

@luistic616, la cuantificación es arma de doble filo, pero por supuesto que puede ayudar.
@Jose Ignacio Familiar, una cosa es la práctica de una actividad profesional y otra todo un conjunto de elementos que la rodean. Como no conozco a esa persona de la que hablas no puedo contraargumentar. Si lo planteas como una generalidad, es evidente que quien trabaja para una empresa típica de consultoría es probable que tenga que asumir un conjunto de prácticas que no definen la consultoría artesana: desde una gestión de proyectos medida sobre todo en horas, hasta la aplicación de las cláusulas de protección de propiedad intelectual que exija su empresa.
Te pregunto: ¿esa persona puede liberar los contenidos de los proyectos y compartirlos vía licencias de Creative Commons, por ejemplo?
Por último, dices que «Creo que te equivocas diciendo lo que se debe hacer o no». Quizá no has leído este artículo en el que hago una aclaración a la consultoría artesana. Si te parece, lo leas y luego comentas, ¿vale? Digo por si puede ayudarte a aclarar el enfoque que le doy. Gracias por colocar peros, siempre ayuda a darle una vuelta más a los argumentos.

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jifamiliar 04/09/2009 - 09:15

Una respuesta a vuelapluma porque los temas tocados tienen profundidades que será interesante explorar con tiempo y calma.

La capacidad de generar con fluidez documentación abundante e interesante no es virtud tan extraña como parece. Además del mencionado, conozco algunos casos más. Estas personas hacen bien en explotar esta capacidad para generar documentos que les faciliten establecer contactos y entrar por muchas puertas.

No había llegado a leer el post de la aclaración con lo cual doy por cerrado el capítulo de cánones y mandamientos. Ciertamente no te equivocas. Simplemente me gustaría insistir en la idea de que la artesanía en la consultoría, lo que yo llamaría más a mi gusto consultoría de autor, consiste en que cada cual sepa manejar lo mejor posible sus virtudes y defectos para construir un estilo personal y efectivo.

Y el tema estrella: qué es consultoría artesana y qué industrial. Sigo atento tus ideas y las de tus compañeros autodenominados artesanos. Me hacen pensar y estas reflexiones pienso que me enriquecen como profesional y persona. Algún día me gustaría tener tiempo para aportar mi punto de vista. Agradezco que agradezcas aportaciones críticas. Sólo dos comentarios rápidos.

Tomar los avances horarios de un proyecto como base fundamental para gestionar proyectos, personas y clientes es lo más estúpido que puede hacer un consultor o un responsable de consultores. Es simplemente un dato más que puesto en contexto con otros permiten construir un escenario sobre el que tomar decisiones, que siempre deben perseguir el beneficio colectivo a largo plazo. Eso sí, estúpidos, haberlos haylos.

Tú mismo has comentado en un post de hace unos meses la dificultad de hacer pública la documentación de proyectos porque sus propietarios son los clientes, y son éstos quienes toman la decisión. El resto de la documentación que genera una empresa de consultoría es básicamente de naturaleza abierta, en muchos casos, incluso, editada con vocación de ser difundida públicamente y sería estúpido poner barreras a su liberación en los términos que define una licencia Creative Commons ¿Por qué no lo hacemos? Porque hasta ahora no hemos pensado en ello. Porque no estamos tan en vanguardia como vosotros en la comprensión del mundo digital y social. Pero ya estamos reflexionando al respecto. Y todo se andará.

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Amalio A. Rey 04/09/2009 - 17:03

Llego tarde al debate, pero es super-interesante. Tres matizaciones sobre los comentarios que he leido:

@cumclavis: «Hace años que trabajo sin “venderle” nada a nadie. Básicamente “propongo” en base a lo que se me propone…» = Vaya, amigo.. que suerte tienes. ¿como haces para que la gente esté siempre «proponiéndote»? ¿de verdad que «nunca» haces nada (genuinamente bien hecho) para «vender» un proyecto que te apetece hacer? ¿y si un día te faltan «propuestas», qué piensas hacer?

@Julen: «no tengo nada claro que deba colocarse el sustantivo “marca” a la persona. Es aceptar que su valor lo pone el mercado y que se vive (más que se trabaja) para incrementar ese valor» = No te me pongas tan serio, Julen. Para la vida NO hay «marcas», pero para el trabajo sí, lamentablemente. Por cierto, tu valor profesional sí que lo pone el mercado, lamentablmente. La «marca» es tu nombre en lo laboral-profesional.

@Julen: «Lo que digo es lo que creo que podemos hacer determinadas personas con ciertos perfiles profesionales y una trayectoria detrás» = Eso a veces no queda claro en tus posts cuando te pones demasiado rotundo, y por eso se agradecen las matizaciones. Por cierto, a todos nos pasa.

Responder
Carme 05/09/2009 - 23:06

Lo confieso, tengo manía injustificada al marketing, así que he leído el post con placer insano. Creo que cuanto más voy leyendo sobre marketing, más rabia me da, sobre todo cuando pienso que si ya saben lo que hay que hacer, ¿por qué hacen lo contrario? Si el marketing permite que les encuentre cuando les necesite, ¿por qué me mandan publicidad al móvil que ni he buscado, ni he pedido, ni me interesa en absoluto? Me tienen harta.
¿Que publicidad y marketing son cosas distintas? Ya, sí, pero ambas están en la misma empresa, no? No pueden contradecirse, por favor!

Por otro lado, Julen, decirte que me chirría un poco la respuesta que das a Yoriento. Entiendo que hablar de la edad es una generalización, con todas las limitaciones de cualquier generalización. Me gustará que abordes este tema, seguro que entonces quedará más claro.

Responder
Julen 06/09/2009 - 21:14

@Carme, escribiré sobre lo que comentas.Dalo por hecho.

Responder
aitormanah 07/09/2009 - 02:38

Antes de empezar a postear, me gustaría recordaros que tengo 26 años, me especialicé en marketing, soy de sangre caliente y tengo poca (o creo que poca) experiencia laboral. Bien, dicho esto, ataco.
Tras leer todo lo que comentáis, me da la sensación de que estáis echando a la hoguera conceptos que en mi opinión no se lo merecen. Sí sí, no habráis así los ojos. No me miréis con cara de asombro. Creo que estáis siendo injustos 😉
La «prostitución de conceptos» es un fenómeno que se da y seguirá dándose toda la vida. Conceptos como Innovación, Publicidad, Emprendizaje, Participación, Marketing, Venta… pertenecen esa la lista de conceptos prostituidos. Opino que todos estos términos nacieron con la mejor de las intenciones, y «gracias» a las Personas (artesanas y no artesanas) las HEMOS ido estropeando. Y lo peor de todo, es que las hemos estropeado por ser unos IGNORANTES. Sí. Por «pensar» y soltar perlas como:
– «marketing es publicidad»
– «vender es manipular y para eso hay que valer»
– «Hacer marketing es hacer catálogos, folletos y anuncios»
– «Vender la moto»
Venga hombre, no nos engañemos, que estamos en un blog! No es que no nos gusten las herramientas de marketing, lo que pasa es que les hemos cogido cierto asquito.
Pero repito: La culpa la tenemos las Personas.
1- Las Personas que hemos hecho un mal uso de las herramientas de marketing y
2- Las Personas que nos hemos dejado persuadir por personas del 1.
Prometo calmarme.

Responder
aitormanah 07/09/2009 - 16:23

Uy… falta de ortografía. Cuarta fila… HABRÁIS… es sin hache. ¿Puedo poner como excusa la hora en que lo escribí? No, no cuela… 🙁

Responder
Juanjo Brizuela 07/09/2009 - 18:01

absolutamente de acuerdo con todos los comentarios, pero me gustaría dar un par de matices.

La comunicación ha de ser RELEVANTE: es decir, que le importe al que la va a recibir. Evitamos la infoxicación (como dice @kulkailer) y por otro lado dejamos de prostituir conceptos (como habla @aitormanah). Y ser relevante es contar algo que interesa al «otro»… creo que tiene mucho que ver con la idea de artesanía (proyecto de matices, absolutamente contextualizado y personalizado… disculpad la «simpleza»).

Por otro lado, respecto a lo de la marca personal, @julen, dentro de esta cosificación, creo que no estamos hablando tanto de mercado sino de la percepción de una persona, como tal. Otra cosa es que alguien esté dispuesto a comprar su conocimento, experiencia y dedicación para colaborar-realizar-trabajar en algún proyecto. Una cosa es lo que vendes y otra cosa, seguramente, es lo que el mercado te compra.

Responder
El marketing del consultor artesano, de Amalio Rey 13/08/2010 - 08:38

[…] Iturbe escribió un post de referencia sobre este tema que llamó “Marketing (inexistente) de la consultoría artesana” y que dio paso a un jugoso debate. Puede interesarte […]

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El marketing del consultor artesano, de Amalio Rey | Blog TRW - El Blog del Tourism Revolution Ecosystem 23/03/2011 - 11:46

[…] Iturbe escribió un post de referencia sobre este tema que llamó “Marketing (inexistente) de la consultoría artesana” y que dio paso a un jugoso debate. Puede interesarte […]

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Consultoría artesana en red » V Congreso Mundial de Consultoría Artesana en Red 18/06/2011 - 05:17

[…] Marketing (inexistente) de la consultoría artesana, acerca de la notoriedad y la forma en que comunicar nuestro proyecto […]

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Comsultor 2.0 – Francesc Grau » La industrialización de las relaciones 29/06/2011 - 17:16

[…] si sumamos esta necesidad de contratación loca por animar la ventas, con un presupuesto (relativamente) bajo, a una exigencia de resultados erróneos (o incompletos: […]

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Blog de Amalio A. Rey · El marketing del consultor artesano (post-182) 03/01/2012 - 20:17

[…] Iturbe escribió un post de referencia sobre este tema que llamó “Marketing (inexistente) de la consultoría artesana” y que dio paso a un jugoso debate. Puede interesarte […]

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