Condiciones para innovar y pensamiento de diseño

by Julen

creatividadDe un tiempo a esta parte una de las líneas que más consenso parece generar en torno a la innovación es la necesidad de crear condiciones que la favorezcan. Daniel Innerarity, refiriéndose a la creatividad, escribía este pasado domingo en El País:

Las fuerzas económicas no son suficientes para «institucionalizar» la innovación. Es indudable que los poderes públicos tienen a su disposición una capacidad configuradora que favorece la innovación, en la cultura, en la sociedad civil, en las organizaciones y las instituciones. La cuestión sería entonces qué condiciones estructurales hay que propiciar para para que haya un clima favorable a la innovación.

Por otra parte, toda la línea de pensamiento de diseño insiste en la aplicación de lógicas diferentes de las inductivas y las deductivas. Su propuesta de lógicas abductivas se puede interpretar también en cierta forma como un cambio de paradigma a la hora de «enfocar» la innovación.  El centro se desplaza hacia las personas y no tanto hacia el objeto de la innovación (en tanto que difícilmente definible en términos de resultados esperados). Se insiste en la creación de ciertas condiciones, en mirar más al proceso y no tanto al resultado final.

Las referencias para profundizar en torno al pensamiento del diseño: Tim Brown, de IDEO; Arnold Wasserman, de The Idea Factory; o Victor Lombardi. Y por supuesto nuestros amigos Ramón Sangüesa y Juan Freire.

Pues bien, si una de las claves es la creación de condiciones y nos centramos en las personas: ¿hasta dónde conviene y se puede crear condiciones estructurales, como las denomina Innerarity, y hasta dónde conviene centrarse más en las actitudes y aptitudes de quienes participan en el pensamiento de diseño? Es decir, ¿cabe generar estructuras que faciliten la innovación o conviene centrar el trabajo en desarrollar aquellas actitudes y aptitudes que se manifiestan en las personas y que nos dicen que estamos ante pensadoras/es de diseño?

Tim Brown define cinco cualidades para este tipo de gente: son capaces de empatizar, disponen de un pensamiento integrador y global, gustan de la experimentación como método de trabajo, disfrutan del trabajo en colaboración con los demás y son optimistas. ¿Nos centramos en trabajar con gente así como prioridad? ¿Deberíamos introducir estas competencias en el sistema educativo y tratar de extenderlas entre la población? No tengo respuestas claras.

Mi única respuesta es la de convertirse en activista de la innovación: desplegar intensidad en diferentes frentes a sabiendas de que a veces es la casualidad (buscada) la que se cruza en el camino. Porque siguiendo con el hilo argumental de centrarnos en el proceso y en las personas, mi conclusión es que las personas conformamos un inmenso océano de diferencias individuales. Entonces, las condiciones son difícilmente reproducibles y cabría considerar que la innovación explota en condiciones únicas, diferentes para cada caso.

No obstante, en todo esto hay una lógica de fondo que dice que a lo mejor hay que empezar con humildad por quitar piedras del camino. No se trataría tanto de crear las condiciones para innovar como de eliminar las que impiden de facto que pueda aparecer. Y aquí una duda tremenda que me asalta es hasta qué punto el poder (sea lo que sea) debiera hacerse a un lado. Porque el poder está a gusto donde está. Y en innovación deberíamos hablar con cierta frecuencia de zonas de «no-seguridad».

Otras lógicas hacen falta, pero incluso así ¿hay quien innova mejor desde sus zonas de confort? La lógica me dice que… también, que las condiciones que nos provocan estados de flujo pueden ayudarnos a ver lo que no veíamos en situaciones de tensión… y al revés. Vaya lío: tan simple como comprender que somos personas, que somos diferentes, combinaciones únicas.

Otro artículo sobre pensamiento de diseño en este blog: Universidad, innovación nacional y pensamiento de diseño.

La imagen: http://www.flickr.com/photos/jef_safi/

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15 comentarios

Andres Oton 06/01/2009 - 13:23

Hola,

Entrada muy interesante sin duda.

Yo creo que el gran problema de la innovación en España es que no se inculca en los procesos educativos. Sin ir más lejos en el bastión de la innovación que es la universidad a los alumnos a penas se les deja participar en los proyectos de investigación. Y para rematar la faena, los alumnos que se quedan tras la carrera para poder hacer investigación e innovación están en unas condiciones terribles.

Con lo cual juntas dos cosas:
– 1º El ingeniero que sale no tiene entrenado ningún aspecto que propicie el fomento de la investigación en la empresa privada
– 2º El ingeniero que se queda está en unas condiciones lamentables.

Bajo esta premisa, ¿quien va a innovar en España?. Después se dice que tenemos uno de los porcentajes más bajos de inversión en I+D. Es normal pues el estado no puede asumir el porcentaje de I+D que en otros países cubren las empresas.

Un saludo,

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Nik 06/01/2009 - 14:39

Y por qué ingenieros? La innovación debe partir de cualquier persona de la organización, no tienen por qué ser ingenieros (y que conste que yo lo soy, eh?).

Volviendo al tema, si bien es cierto que habría que potenciar un «activismo de la innovación» entre las personas (actores fundamentales de la innovación), la organización debe presentar una estructura adecuada que permita convertir ideas en proyectos y los proyectos en productos/servicios que aporten valor. Si la idea surge pero no llega a los órganos de decisión por falta de estructura, de poco me sirve innovar.

Un saludo.

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Iván 06/01/2009 - 18:24

Desde luego los condicionantes para innovar creo que deben incluir,espacios de libertad,confianza,rapidez,tolerar el fracaso ,apostar por la juventud, arriesgar ,etc,

en España los antecedentes son bastante precarios en muchos aspectos,creo que muchos van relacionados con la educación y la cultura( tanto de la universidad,como de la sociedad como de las empresas),es bastante penoso muchas situaciones de investigadores que se van fuera porque aqui sus condiciones son bastante precarias,estas navidades un viejo amigo del barrio ingeniero químico dedició coger la mochila e irse a Holanda

en mi caso,me hubiera gustado que en mis tiempos de Universidad alguno de mis profesores nos hubiera hablado de innovación,emprendizaje,etc ,pero la realidad no fue esa,y muchos de los mejores de la promoción aspiraban y siguen aspirando a la comodidad( funcionarios)

no sé si son cuestiones culturales, pero veo que comparado con otros lugares y latitudes creo que por aqui muchas veces( la mayoría) tener entre 25 -30 años sigue siendo un gran obstáculo para que crean en uno,siempre hay excepciones.pero en las altas esferas siguen negando mucho a la juventud alegando :falta de contactos,falta de experiencia etc, siguen con métodos y actitudes que no han variado con el paso de los años y las decadas

pero en fin,conviene ser optimistas
salu2
Iván

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[cumClavis] 06/01/2009 - 23:05

Magnífica reflexión. Quería humildemente añadir que, entre estas condiciones también hay que considerar las posibilidades (voluntades) de los que dirigen a estos innovadores/diseñadores en potencia. Me refiero a: para innovar está claro que se ha de estar informado y para estar informado casi no se puede evitar invertir tiempo en hacerlo (buscar, ver, reflexionar, expandir, imaginar…). ¿Están las organizaciones dispuestas a dejar de capar los sistemas de información y a permitir que sus innovadores “pierdan el tiempo” informandose? Realmente se quiere que la gente innove siguiendo un proceso o, como siempre, se persigue el producto…así, sin más…?
Es que, eso es con lo que me encuentro normalmente…

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Consultoría artesana en red » Innovación abierta desde modelos tradicionales 07/01/2009 - 07:17

[…] Condiciones para innovar y pensamiento de diseño […]

Responder
Julen 07/01/2009 - 07:28

@Andres Oton, ahí en la Universidad tenemos uno de los grandes retos (por leerlo en positivo). Dices bien que por ahí va una de las claves.
@Nik, ¿ingenieros? En buena parte representan un colectivo con el que empezar a cambiar cosas. De ellos (hombres casi todos) ha dependido la gestión de las empresas porque han sido los predestinados a llegar a la dirección, en gran número de casos. Echa un vistazo a este artículo de Manuel Castells. A mí me encanta: ¿Ingenieros o antropólogos?
@Iván, es la pescadilla que se muerde la cola: entornos que no fomentan la innovación pues innovación que no sucede y como ésta no sucede no se modifican los entornos: así hasta infinito. Menos mal que algunos os animáis a romper el círculo.
@cumClavis, eso es, informarse es un primer paso fundamental. Pero «perder el tiempo» es un concepto demasiado extendido en nuestros esquemas de gestión. Lástima que sea así.

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los sueños de la razón / El semanal de anotaciones (invierno 2009, 2º domingo) 11/01/2009 - 20:57

[…] que se trata no es de eliminar obstáculos para innovar y no tanto de buscar cómo innovar más, en Condiciones para innovar y pensamiento de diseño. Parece ser que quien lo tenía claro era nuestro mítico doctor Einstein. Ivan Lasso nos trae una […]

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Design Thinking aplicado a la investigación | Consultoría artesana en red 12/07/2012 - 04:56

[…] pasa el tiempo), es cierto que me aproximé a las lógicas del pensamiento de diseño y escribí Condiciones para innovar y pensamiento de diseño, pero nunca me he puesto manos a la obra a aplicar sus principios de forma organizada y metódica […]

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El barbero de ... Murcia | La i de innovación - Blogs laverdad.es 03/10/2014 - 11:07

[…] decidí convertirme en un activista de la innovación por dos razones fundamentales. La primera de ellas es porque las publicaciones  de los expertos en […]

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