Mañana último programa en MQP

by Julen

Parece que fue ayer cuando Javier Vizcaíno, Mr. Cocidito Man, me ofreció la posibilidad de conversar de otra forma: en la tertulia A tres Bandas de su programa Más Que Palabras de Radio Euskadi. Pues bien, tras un año en antena cada dos domingos, mañana domingo día 13 de julio cierro una etapa.

Ha sido una experiencia interesante en un medio de comunicación de los que siempre hemos llamado «de masas». Desde luego que, comparando la repercusión de este blog con la radio, no hay color. Es mucha la gente que durante todo este año me ha dicho eso: «Oye, que te he oído en la radio. Porque, eres tú, ¿no? Me pareció tu voz.» Pues sí, ha sido mi voz, mi otra voz, no la que saco por estos artículos del blog.

Son registros diferentes, muy diferentes. En la radio estás constreñido por la tremenda presión de un tiempo que es implacable. Y qué decir del metódico trabajo de milimetrar temas, personas a entrevistar, anuncios o informativos. Es un medio directo que creo representa a toda una generación que nos precedió y que no sé muy bien cómo encaja con nuestros días de principio de siglo XXI. Es evidente que mucha gente ha sentido, siente y seguirá sintiendo la radio como compañía.

Sin embargo, también creo que la radio, como medio de comunicación, está demasiado cautiva de sus propietarios. Hay un discurso que sigue controlado porque detrás de cada palabra que sale a la radio, alguien está pensando que es una forma de influir en la ciudadanía, de crear estados de opinión y cosas de esas. Así que la radio creo que en parte está enferma porque no puede escaparse de las garras de quienes ven en ella la herramienta para influir en la sociedad. Así de simple y así de triste: el mensaje demasiadas veces cambia según quién es el mensajero. No creo que a esto escape casi ningún medio de comunicación, aunque también es cierto que hay intentos por generar nuevos discursos.

En mi humilde experiencia, la radio me ha servido para compartir tertulia casi siempre con Iratxe Molinuevo aka Moli, y con Carlos Vilches, gente de bien que se diría. También he podido conocer al equipo del innovador (¡¡toma goma!!) Javier Vizcaíno, aclamado por las multitudes a través de un premio Ondas: Loreto Larumbe, Javier Domínguez, Itsaso Güemes y Cristina Álvarez sobre todo. Y disculpad que haya otros nombres que esté dejando en el tintero teclado. Todavía recuerdo el día en que hubo inundaciones en Getxo y pude ver a una redacción hiperrevolucionada, en pleno festín de actualidad e improvisación, con todo este equipo enfrascado en contar lo que estaba pasando.

Sinceramente creo que no sirvo para perdurar como tertuliano. La experiencia ha sido estupenda, pero reconozco que me ha hecho caer en la cuenta de que no me siento cómodo en ese discurso. Por la razón que sea, pero muchas veces he salido de la radio dándome cuenta de que allí hay otra forma, muy diferente a la que uno ya ha acostumbrado a su blog, que no sabes muy lo que es, pero que es tuyo. La radio es medio de comunicación de masas frente a este humilde blogsito, como lo llamaría Boquitas Pintadas. Y mi natural aversión a las masas de más de 3 personas fluye a borbotones más veces de las que sería deseable. Así que lo dejamos aquí, como amigos.

Mañana, por tanto, será el último día de esa colaboración. Quizá haya otras, pero serán necesariamente diferentes. No sé si es un hecho aislado o el principio de un repliegue. Espero que el lunes pueda decir que no a otras dos cosas. Ya os he machacado unas cuantas veces con la importancia de decir que no. Y en mi caso, la fase expansiva en la que me he movido sobre todo en los dos últimos años quizá debamos cerrarla, no de un portazo, pero sí con firmeza y convicción.

Así que mañana mi última tertulia A Tres Bandas. Pero la conversación continúa. Tiene muchas formas y colores. Seguro que seguiremos disfrutándola. Gracias a Javier V, Iratxe, Carlos, Loreto, Javier D, Cristina e Itsaso. Un placer la conversación, incluida con toda certeza la de mañana donde me inquieta la presencia espía de una tal Nati, con quien cierro el círculo que ella misma abrió.

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8 comentarios

Lula Towanda 12/07/2008 - 08:46

Son sabias decisiones para seguir sintiéndote tu mismo. Ganarás a la larga.
La audiencia del blogsito está en la justa medida de no perderse entre audiencias anónimas.

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iturri 12/07/2008 - 11:27

Entiendo lo que dices, Julen. Son lenguajes, medios distintos y no resulta fácil tenir siempre algo que decir cuando te lo preguntan. No puedes esperar y ver qué se te ocurre a los cinco minutos. Impone, buff.

De todas formas, como experiencia me da que es un lujo trabajar con el equipo de MQP.

Ánimo, señor No.

Iturri.

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Iñaki Murua 12/07/2008 - 17:18

¿Y con quién vamos a chatear en vivo y en directo, para asombro de Moli?

Adelante con tus decisiones y tus noes 😉

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Carme 12/07/2008 - 17:34

Enhorabuena, Julen!

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aurzelai 12/07/2008 - 21:21

Un placer haberte escuchado Julen (por lo menos cuando el peque me ha dejado). Ahora… seguiremos leyéndote, y de cuando en cuando conversando. Enhorabuena por tu papel con el micro.

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Julen 13/07/2008 - 07:14

lula, replegarse para ser más pequeño en esta inmensidad es una defensa. Aunque a veces no sé ni de dónde viene el ataque o si soy yo mismo quien encendió la mecha.
iturri, nosotros tenemos canal B, jajaja. Nos leemos. Gracias.
iñaki murua, pues sí que a lo mejor lo echamos en falta, ya veremos.
carme, gracias.
aurzelai, el micro seguirá allí. Nosotros, mientras tanto, continuaremos de viva voz en las aulas.

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Noemí Pastor 13/07/2008 - 08:40

Yo también te echaré en falta en el chat y en las ondas. Un beso.

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Moli 13/07/2008 - 22:07

Acabo de ver este post. Y como te he dicho ya todo y se necesitan «más que palabras»: es tu turno, sigue siendo voz; donde decidas, quiero seguir escuchándote… amigo y compañero.

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