Innobasque 2.0

El lunes por la tarde estuve un par de horas con el consejo de dirección de Innobasque, mayoría de corbatas que bien se encargaron de recordarme. En fin, al margen de estos pequeños cariños que nos hicimos, me pareció ver alrededor de aquella mesa la realidad de la empresa que tenemos que esta zona al sur de Islandia.

Todavía albergamos dudas de si Internet es de verdad o es un invento del doctor No. Sigue con nosotros la idea de que es un sitio donde, previo encargo, ciertos especialistas pueden construirte un lugar referente desde el que puedas dominar la parte del mundo que te interesa. Para mí Internet tiene que ver con la digitalización y me parece que este segundo concepto es más fácil de hacer comprender a quienes han gestionado con éxito empresas de las de toda la vida. Lo digo así porque la digitalización puede provocar una reducción impresionante de costes. Y como dinero es dinero, pues como que se explica más fácil. Si tu negocio no está hipotecado por tus stocks físicos sino que puedes permitirte el lujo de disponer de ingentes stocks a coste cercano a cero, entonces seguro que a mucho gestor le brillarán los ojos.

El caso es que estuve allí un par de horas. Y en la confusión del momento hasta es posible que acabara metiendo más dudas que luces. Pues vaya ayuda que presto, ¿no? Porque lo que se piden son luces, soluciones, qué hay que hacer. Es la petición que cualquier ejecutivo realizaría. Mira chaval, aquí no estamos para perder el tiempo, así que dinos qué hay que hacer, que no tenemos mucho tiempo; hay otros asuntos que tratar. Lógico, el mundo es como es y no vamos a pensar que las cosas son distintas porque una cuadrilla de freakies lo digamos, algunos incluso pasados los 40. Que ya no estás para esto.

Claro que la carga de profundidad que cae puede poner nervioso a más de uno. O sea, que no es una cuestión de que «otros» me hagan el trabajo de construirme el chalet en Internet con vistas espectaculares y que sea la envidia del terruño. O sea, que me estás diciendo que me tengo que arremangar a hacer un agujero donde cimentar el chalet y que tendré que ponerme a hacer lo que toda la vida han hecho los gremios. Pues sí, más o menos. Pues la hemos liado. Pues sí.

No obstante, todavía brilla un rayo de esperanza depositado en la web de toda la vida. Cuando llegues a un lugar llamado innobasque.com te encontrarás un buen día de estos con un trabajo bien digno, llevado a cabo por los gremios interneteros. Y hará falta que ese edificio esté bien construido y que encandile con su diseño. Pero su peso relativo en lo que vayas a ser para la generación que nos pisa los talones es cada día menor. No van a localizar tu video estupendo en innobasque.com, porque no buscan ahí sino en Youtube. Y eso, lo siento, pero no lo decidimos ni tú ni yo; lo deciden los estilos de vida, la mutación de costumbres sociales, las nuevas reglas de la sociedad del siglo XXI. Y aunque queramos generar una forma de estar en Internet, el mundo en su conjunto es una apisonadora. Mejor adecuamos nuestro ritmo al suyo y caminamos en sintonía. Porque si quieres enfrentarte y hacerlo de aquella otra manera en la que hacíamos las cosas antes, la apisonadora te va a aplastar.

Creo sinceramente que las cosas van a cambiar en las empresas. Que cuando hablamos de innovación y de obras faraónicas para llevarla a cabo no va a quedar más remedio que bajar a la conversación de barrio, de persona a persona. Me encanta cuando Alorza insiste tanto en participar en conversaciones que ya existen y no tanto en generar nuevas conversaciones. Es un estupendo acto de humildad. Porque por muy grande que seas, por mucha capacidad que tengas, por muy ambiciosos que sean tus objetivos, no eres más que yo, no te queda más remedio que conversar conmigo. Y si tus argumentos son mejores, entonces entenderé por qué tenemos que seguir llevando corbatas para innovar. Y diré que ha estado bien la conversación, que hemos aprendido, que los mercados son conversaciones.

Mientras tanto el mundo camina deprisa por aquí. Google encara su primer pérdida seria de valoración en bolsa pero es nuestra gran herramienta para saber quién es Txema Villate, Pili Kaltzada o Pedro Luis Uriarte. Sobre todo si vivo allá lejos en aquella otra parte del mundo y un día escuché que había un proyecto tremendo en otra esquina del planeta: algo que llamaban Innobasque. Y como quería saber de ti, te busqué por Internet. Yo soy Julen, simple consultor artesano. Seguro que encontramos la forma de conversar. Gracias.