Comentábamos en el descanso que esto de emprender 2.0 parece más fácil que «emprender» a secas. Quizá la razón sea la pasta, quizá la razón sea la edad… o quizá la razón sea que ahora quizá tenemos medios de los que antes no disponíamos. Si tenemos ideas y son ideas que pueden circular en digital y de acuerdo a los principios del mundo 2.0 quizá tengamos un nuevo horizonte frente a nosotros.
David del Val, fundador de TechFoundries y VXtrem, dice que emprender necesita pasión. Habla del emprendedor «tecnológico» y resulta que quiere cambiar el mundo y pone eso antes que cualquier otra cosa. Primera enmienda a la totalidad. Trabajo por encima de las demás cosas, amarás al trabajo sobre todas las cosas. ¿No hay otro modelo posible? Bueno, nos recomienda para emprender bien: rodearse de buenos asesores, tener un buen consejo de administración con gente que te diga las cosas a la cara y sin tapujos, un poco de marketing para introducir mejor la voz del mercado. Y, ¡qué gracia! dice que los consultores no somos capaces de crear una empresa y que le tenemos miedo al riesgo. Pues claro, chaval. Nos falta foco, nos falta centrarnos, nos falta pasión concentrada, nos falta dedicarnos cien por cien a algo.
Agustín Cuenca dice que él es empezador y no tanto emprendedor. Salao el tipo: inversión punto «pon» (porque tú pon dinero y déjate de puntos «com»). Tiene un montón de empresas. Se emprende: si tienes pasta (la hija del Botín), si tienes padres o si no te queda más remedio. Este último es el más habitual. Bueno, bueno… va y dice que el emprendedor nace. Nada de que se hace; nace. Y no va de dinero… no del todo. Va de insatisfacción con la realidad, va de crear, va de auto-reconocimiento. En general, es una presentación que va al grano. Muy interesante este tipo.
Una idea que ya estamos manejando y que Agustín comenta es la cada vez mayor inutilidad de los business plans. La capacidad de predicción de los mercados es cada vez menor. Eso sí, unas mínimas previsiones de tesorería siempre harán falta, pero de ahí a invertir un puñado de horas en una planificación que la mayor parte de las veces no acierta, en fin…
David Blanco está allá en Barcelona. Es fundador de Tractis y va a centrar su presentación en la web. Insiste también en que los costes para comenzar son mínimos, así que ¡adelante! Se trata, no obstante, de crear empresas, no webs. La diferencia la generas si tienes contigo a la mejor gente. Y más cosas, pero no voy a contarlo todo, ¿no?
José Carlos González Cristóbal, co-fundador de Daedalus se disculpa porque ¡sólo ha creado una empresa! Oh, qué pena. En común con los demás: la insatisfacción inicial respecto a la transferencia de tecnología desde la investigación al mercado. Comenta su proyecto, que tiene que ver con la búsqueda de información, tratando de aportar funcionalidades novedosas: textos especializados, localizadores borrosos, buscadores multilingües y de imágenes con tecnología de web semántica o incluso correctores lingüísticos y otro tipo de herramientas de análisis semánticos para blogs…
Y llegan las preguntas. La primera, en la diana: cómo consigues pasta. David Blanco dice que hables primero con otros emprendedores que ya lo han conseguido. Sentido común. Buena respuesta. Y otra mejor: no te muevas con las subvenciones de la administración porque su velocidad no tiene nada que ver con la que te hace falta en Internet.
Raúl garaje 30.com pregunta cómo hacer para detectar si el mercado está preparado para nuestra idea. Agustín contesta inteligente: el mercado se está equivocando porque «todavía no se ha dado cuenta de lo buena que es nuestra idea». Hay que probar para ver si hay agua en la piscina. Hay que buscar si hay gente por ahí que ha probado cosas parecidas.
Ah, saludos para fesja, blogger oficial del evento, ¿dónde estás? 😉
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6 comentarios
Yo estoy en esto del emprendizaje con un proyecto propio que tal vez algún día presente pero sí quiero dejar constancia de una cuestión ¿Por qué hay tanto funcionario o parafuncionario financiado con dinero público vendiendo a los demás los parabienes de ser emprendedor?
Supongo que para emprender, aparte de un objetivo claro, es necesaria una Alta (que no lata) motivación.
Cuando el entorno no acompaña, lo que es peor, tienes dos opciones; apolillarte o arriesgar.
Opino qeu no hay nada mejor que ser tu propio Jefe.
Estoy en ello, buscando el nicho adecuado.)
Vamos, madurando para ser Joven.
Salvd¡
Julen, un resumen realmente estimulante¡ Respecto al asunto del plan de empresa o de negocio, mi opinión es que sigue siendo tan útil como siempre porque te permite evaluar y comparar lo previsto con los resultados. Y es que el objetivo de un plan no es que se cumpla el propio plan, sino ser una herramienta de mejora continua, no?
Carmen, sobre los «servicios de apoyo a emprendedores» lancé en julio algunos pildorazos y unas cuántas preguntas incómodas como la tuya: si tan guay es emprender, ¿por qué muchos de los que lo recomiendan no predican con el ejemplo? 🙂
Yo tuve el gusto de trabajar para Agustín Cuenca entre el 2000 y el 2002, y tengo que reconocer que nunca he estado tan a gusto en ninguna empresa. Ni he visto una empresa que supiera aprovechar tan bien el conocimiento de su gente, ni tanta gente inteligente y preparada junta.
Qué pena que nos fuéramos al garete.
carmen, es que ahora mismo es evidente que la administración quiere fomentar el emprendizaje.
unantonio, espero que encuentres el nicho 😉
yoriento, quizá el plan de negocio haya que «relativizarlo» porque el problema a veces es el tiempo que se lleva y lo poco que acaba reportando, sobre todo, cuando las previsiones no coinciden con la realidad.
ale, pues no sé de su actividad empresarial, pero me ha parecido un buen comunicador, directo al grano.
Julen, cada día estoy más cerca de estos planteamientos, creo que si soy emprendedor, cinco años llevamos un par de socios con Simbec ibérica S.L., dentro del sector farmacéutico. Sin plan de empresa, sin presupuesto, sin estructura (trabajamos en casa), en definitiva sin casi nada y funciona bien (alguno diría que muy bien). Esta experiencia me ha llevado a una segunda empresa con los mismos principios y empezamos a caminar bien (WWMinds). El movimiento andando, el riesgo es la vida, la motivación, como casi todos llegar a final de mes. En definitiva radical en los planteamientos.